El lupus es una enfermedad plural. Hay muchos lupus. De hecho es el nombre que se da a un grupo de enfermedades que cursan además de con otros muchos síntomas, con afecciones de la piel. Y se llama lupus porque en la Edad Media se daba este nombre a los que la padecían por el parecido de las lesiones cutáneas con mordeduras de lobo.
El lupus que más preocupa es el llamado Lupus Eritematoso Sistémico, que frecuentemente se menciona por sus iniciales: LES.
Por algún motivo que se ignora, el sistema inmune de los enfermos de lupus en vez de defender al individuo lo ataca produciendo muy diversas lesiones. Cuando se produce la enfermedad se comprueba que el sistema inmune es muy activo y que produce muchos más anticuerpos de lo deseable, anticuerpos que reaccionan contra los tejidos del propio enfermo
Se desarrolla con tal variedad de síntomas que no puede definirse un patrón claro. Se manifiesta por ciclos con exacerbaciones y remisiones y se calcula que se presenta en una de cada 1000 personas.
En España hay una prevalencia de la enfermedad muy alta, debido entre otras cosas a que el sol afecta a la aparición y activación de brotes de la enfermedad. Y aunque realmente la causa última de la enfermedad se desconoce, se sabe ya por ejemplo que los estrógenos tienen una gran influencia. Por eso, la enfermedad es muchísimo más femenina que masculina (hasta un 90 por 100 de enfermos son mujeres) y por eso suele aparecer en la etapa más fértil de la mujer, entre los 20 y los 30 años.
Se caracteriza por la inflamación de distintos tejidos y órganos. Y su gravedad varia mucho en cada caso: depende de la cantidad y de la variedad de anticuerpos y órganos afectados.
La causa exacta del lupus se desconoce. Es una incógnita más del sistema inmune. Las defensas no reconocen sus propias células y las atacan como si fueran cuerpos extraños. El problema es que, debido a la gran variedad de síntomas que presenta, puede parecerse a otras muchas enfermedades. El cansancio, la pérdida de peso sin razón y la fiebre prolongada son los síntomas más frecuentes. El 90% de los pacientes padecen dolor e inflamación de las articulaciones. También son frecuentes lesiones en la piel. La más conocida, aunque no la más frecuente, es el 'eritema en alas de mariposa', que consiste en un enrojecimiento y erupción de la piel en las mejillas y nariz.
Por otra parte, se produce una inflamación de las capas de revestimiento del corazón y de los pulmones, lo que origina pericarditis y pleuritis. El riñón enferma con frecuencia en el lupus. Casi todos los pacientes con lupus tiene el riñón inflamado; sin embargo la mitad de ellos no tendrá nunca alteraciones en los análisis de orina ni en los de sangre y el riñón les funcionará con normalidad.
Desde luego, en muchos pacientes, el sol puede influir de manera determinante. Por ello, deben abstenerse de exponerse a los rayos solares. Y parece que las hormonas sexuales femeninas aceleran el lupus y las masculinas protegen de la enfermedad.
El pronostico de la enfermedad ha mejorado notablemente en los últimos años, tanto por el tratamiento como por el mejor diagnóstico temprano. En más de la mitad de los pacientes puede decirse que la enfermedad se cura en pocos años.