Si va a viajar este verano, recuerde...

 

Tras la etapa de cierres perimetrales, parece que las ganas de viajar se han disparado. Por eso nos ha parecido oportuno recordar algunas normas para que una simple diarrea no arruine unas vacaciones. 

Algo tan común como la llamada “diarrea del viajero” puede afectar hasta al 40 por 100 de los que visitan zonas tropicales. Normalmente esta diarrea está producida  por bacterias que se adquieren a través de bebidas o alimentos contaminados. Aunque no suele ser grave -solo uno de cada cien necesita ser ingresado- altera todos los planes. Y hay que tener en cuenta que son especialmente vulnerables los niños, embarazadas, ancianos, quienes tienen bajas las defensas o los que toman antiácidos y tienen problemas gástricos.

Lo más importante a la hora de planificar el viaje es meter también en la maleta la mentalidad preventiva; es decir, ser conscientes de que siempre puede haber riesgo.

Lo aconsejable

El Ministerio de Sanidad ha publicado una serie de normas que conviene tener en cuenta. Mes y medio antes del viaje, consulte en el centro de vacunación internacional para conocer la situación sanitaria del país de destino y las medidas de prevención que deban adoptarse.

Visite al médico antes del viaje si padece alguna enfermedad o alergia o está tomando algún tratamiento. Es importante informarse sobre el sistema local de asistencia sanitaria y conocer la extensión de la cobertura de su seguro.

Elegir ropa y calzado adecuados y llevar un pequeño botiquín que contenga material de cura y algunos medicamentos para síntomas menores (como analgésicos o antihistamínicos).

En el país de destino, precaución con los alimentos y bebidas, que son la causa más frecuente de enfermedad en el viajero. 

Algunos consejos:

• Lavarse las manos con frecuencia para evitar infecciones.
• Beber agua embotellada o tratada y evitar el consumo de hielo que no haya sido preparado con agua segura-; consumir sólo leche envasada y derivados lácteos higienizados.
• Precaución con la repostería y los helados.
• Las comidas deben estar cocinadas y conservadas a temperatura adecuada: evitar los productos crudos y especial cuidado con las salsas y los preparados que contengan huevo crudo.
• La fruta debe ser pelada personalmente y las verduras no deben comerse crudas.
• Evitar el consumo de productos de mercadillos ambulantes.

Especial atención a los riesgos relacionados con el entorno: protegerse del calor, de la humedad y de la exposición directa al sol, especialmente en las personas mayores y los niños; protegerse contra picaduras de insectos con ropa adecuada, repelentes y, si fuera necesario, mosquitera para dormir; extremar las medidas de precaución en los accidentes de tráfico y las lesiones o contagios en los lugares de baño; cuidar la higiene personal. Al regresar del viaje, si presentase algún problema de salud, debe consultar con los centros de vacunación internacional o con su médico habitual.

Si está embarazada

Planifique el viaje para el segundo trimestre es el mejor momento; además en algunas compañías no admiten mujeres en las 6 últimas semanas de gestación. Durante el embarazo, en general, están contraindicadas las vacunas con virus atenuados. El paludismo es especialmente grave en el embarazo, tanto para la madre como para el feto, por lo que se deben extremar las medidas de protección para evitar la picadura de mosquitos (los repelentes como el DEET aplicados en la piel NO están contraindicados). En lo que respecta a los medicamentos antipalúdicos debe pedir consejo médico.

En el embarazo aumenta el riesgo de tromboembolismo e infección urinaria. Durante el viaje en avión, deberá ejercitar las piernas al menos una vez por hora y orinar con frecuencia.

La diarrea deberá ser tratada enérgicamente con rehidratación oral.

Recuerde...

Antes del viaje exótico

• Vacunación contra tétanos, fiebre tifoidea y polio; comprobar inmunidad frente al sarampión.
• Prevenir el paludismo con quimioprofilaxis y medidas que eviten la picadura del mosquito transmisor.
• Preparar un botiquín.
• Las personas con enfermedades crónicas deben incluir medicamentos habituales.

Durante el viaje

• Beber agua envasada y asegurarse de que la abren en nuestra presencia. (Evitar cubitos de hielo y lavarse los dientes con agua envasada).
• No comer alimentos crudos o semicocinados, evitar comer fruta sin pelar.
• No consumir leche ni derivados sin garantía higiénica y en caso contrario hervirla durante al menos 15 minutos.
• Cuidado con repostería, helados, alimentos de puestos ambulantes, y no tomar cremas o mayonesas.
• Prevención frente a las enfermedades de transmisión sexual.

Después del viaje

En algunos casos (paludismo) es necesario seguir tomando alguna medicación. En caso de cualquier trastorno extraño, informar inmediatamente al especialista detallando los viajes del último año.