La Comisión Europea ha publicado un documento (Libro Verde del Envejecimiento) en el que habla, entre otras cosas, de retrasar la jubilación hasta los 70 años. Estas ideas no son nuevas, y al margen del reciente documento de Bruselas abierto a consulta pública hasta el 21 de abril, las intenciones de la UE, –gobernada desde el neoliberalismo de la derecha europea–, no son solo de incrementar la edad de jubilación hasta los 70 años; sino, y esto es más grave, posicionarse a favor del lobby privatizador de los sistemas nacionales de pensiones. La aprobación de los planes paneuropeos de pensiones, son sin duda un anticipo de hacia dónde caminan en la escalada privatizadora y la apuesta por el tercer pilar de previsión social.
De todas formas, hoy en España, ya se ha aumentado la carrera profesional o de cotización para alcanzar la jubilación al 100%, y seguirá creciendo hasta llegar a los 67 años en el 2027. Por tanto, el camino ya está iniciado. Si finalmente se aprueba el pasar de 25 a 35 años el periodo de cotización para calcular la pensión, significa de “facto” incrementar la edad de jubilación. Hoy, con carreras profesionales más cortas por las dificultades del mercado laboral, nos iríamos por encima de los 70 años para que se puedan jubilar las actuales generaciones al 100%.
Qué están haciendo otros países
Francia, Alemania o Bélgica ya han aumentado la jubilación a los 67 años o están en camino de hacerlo, con algunos criterios específicos, y con huelgas generales como la que convocaron a Macron los sindicatos franceses. Este es un debate muy ligado a aquellos que argumentan que si la esperanza de vida ha aumentado, debe aumentar en la misma proporción la vida profesional y por tanto la edad de jubilación. No podemos mantener, dicen sus defensores, la misma edad de jubilación que había en los años 60 con una esperanza de vida mucho menor.
Poco les importa el reparto del trabajo cada día más escaso y evidentemente no tienen en cuenta la dificultad actual del mercado laboral, al cual se accede a una edad elevada. En los años 60 te iniciabas en la escuela de aprendices con 14 años, algo impensable en nuestros días con un 50% de desempleo joven. Debemos añadir a esto la transformación digital del mundo de la empresa y la laminación de puestos de trabajo que genera, trabajos estacionales, eventuales, de bajos salarios... En definitiva, trabajos precarios con escasa continuidad en la carrera de cotización y por tanto pensiones miserables.
Defensa del Sistema de Bienestar
Nosotros seguimos planteando la defensa y profundización del Estado de Bienestar, tan maltrecho con las políticas de austeridad y privatización impulsadas por el PP. Y por tanto, apostamos por una de sus bases fundamentales defender nuestro sistema público de pensiones y ampliar las inversiones en políticas sociales: sanidad, educación protección, como elementos para vencer la pandemia y luchar contra la pobreza y las desigualdades sociales cada día más profundas.
Por tanto, y como siempre, nuestra respuesta a cualquier medida que atente contra el sistema público de pensiones, independientemente de quién esté en el Gobierno, será su defensa, lo primero y la movilización después, si ésta es necesaria y nuestras reivindicaciones desoídas.
Anatolio Díez Merino, Secretario General de UJP-UGT.