Un experimento de campo realizado por la Fundación ISEAK para el Gobierno vasco ha medido cómo afecta la discriminación por edad para contratar trabajadores en España. Los resultados no dejan lugar a dudas: a partir de cierta edad, sus currículums son invisibles o en su mayoría van directos a la papelera, como muestra el hecho de que los candidatos mayores reciben la mitad de invitaciones a una entrevista laboral que los de menor edad con perfiles similares.
¿Cuáles son los principales factores que frenan e impiden que los sénior sean contratados por las empresas o que hallen un nuevo empleo cuando pierden el que tenían? Según la Encuesta Talento Sénior elaborada por 65YMÁS, diario de referencia de este segmento de población, existen tres handicaps fundamentales: la brecha digital, que es el factor determinante para el 28,8% de los encuestados; las dificultades adaptativas por motivos generacionales, principal razón que esgrime el 27,3%; yel mayor salario que habitualmente piden y se paga a los sénior, que complicaría la contratación para el 26,1% de los encuestados.
Fuente: Encuesta Talento Sénior 65YMÁS
Esta Encuesta, confeccionada mediante 3.366 respuestas, vía online, con un 67,9% de participantes hombres y un 32,1% mujeres (el 73% entre 60 y 75 años, y nivel educativo repartido entre un 53,5% con estudios secundarios, 37,6% universitarios y 8,9% primarios o inferiores), concluye, por tanto, con un casi empate entre las tres razones citadas, y revela asimismo que una minoría del 17,8% de encuestados cree que las dificultades de los sénior para convencer al departamento de Recursos Humanos dependen de otros factores.
Por un lado, la brecha digital aparece como obstáculo para muchos trabajadores mayores, que no han tenido acceso a la formación en tecnología, o no se sienten cómodos con las herramientas digitales en el puesto de trabajo. Esto puede hacer que las empresas prefieran contratar a trabajadores más jóvenes, incluso nativos digitales.
La segunda gran barrera, las dificultades para encajar en el equipo, debido a razones generacionales, complica el contratar a personas mayores de una cierta edad. En algunos casos, debido a que los más jóvenes pueden tener prejuicios o estereotipos sobre los mayores, las empresas acaban prefiriendo contratar a los más jóvenes, pensando que se adaptarán mejor a la cultura empresarial.
En cuanto a la importancia del salario, estudios llevados a cabo en España sugieren que, aunque es importante para los trabajadores mayores, no es necesariamente el factor más relevante a la hora de buscar o aceptar un trabajo.
Existen otros factores, como la flexibilidad laboral,la conciliación familiar, la formación y el desarrollo profesional, que pueden ser tan o más fundamentales que la remuneración económica.
Los sénior piden pensión y empleo compatibles
Otra de las conclusiones de la Encuesta de 65YMÁS es que el 76% de los sénior reclama un modelo sostenible y voluntario, donde sea factible percibir la pensión que les corresponda y, a la vez, seguir trabajando, ya sea en sus puestos previos a la jubilación, o en uno distinto, y que la actividad profesional pueda realizarse por cuenta propia o como asalariados.
Numerosos expertos y estudios al respecto apuntan que, si los trabajadores mayores pueden continuar trabajando tras la jubilación, seguirían aportando a la economía, a través de su trabajo, pagando impuestos. Esta nueva fórmula de compatibilidad sería beneficiosa para la economía en general, especialmente en el contexto de envejecimiento de la población española, y con la masiva jubilación del baby boomen puertas.
Programa Talento 45+ de Cámara España
La Cámara de Comercio de España tiene entre sus objetivos impulsar la inclusión laboral y el emprendimiento de los trabajadores sénior, y en la actualidad está desarrollando la campaña ‘El Valor Sénior’, junto al diario 65YMÁS. Enmarcada dentro del Programa Talento 45+ (financiado por la Unión Europea), ofrece orientación, intermediación laboral y formación para mejorar las competencias digitales y profesionales de personas desempleadas o inactivas entre 45 y 60 años.
El reciclaje profesional y la formación en habilidades tecnológicas son dos materias clave para que estos trabajadores puedan reintegrarse en el mercado laboral, tal y como ponen de relieve desde Cámara de España.
Hándicap: El 56% de parados tiene más de 45 años
Durante el acto de presentación de la Encuesta de 65YMÁS, Francisco Valle,Consejero Delegado de 65YMÁS, denunció cómo "en 1996, solo el 22% de los parados eran mayores de 45 años, mientras que, según los últimos datos, rozan ya el 56% de los desempleados". Este desperdicio de talento perjudica a las personas que sufren el desempleo, y también plantea retos inéditos al mercado laboral, en una España que se encuentra a punto de experimentar el retiro de los 'boomer', es decir, la desaparición de la mano de obra de la generación más numerosa de cuantas han existido.
A este respecto, Ana Bedia, directora de 65YMÁS, instó a la sociedad a eliminar los prejuicios edadistas, que constituyen una rémora en lo personal, profesional, cultural y social, además de hacer hincapié en que el futuro de las empresas, administraciones e instituciones va a depender de cómo gestionen y aprovechen este talento.
Por su parte, Rafael Fernández Cañas,Director de Relaciones Institucionales en Comunicas, consultora de comunicación especializada en Economía de la longevidad, desveló que la Encuesta de 65YMÁS refleja que 7 de cada 10 sénior exigen mayor presencia en las empresas e instituciones. A su juicio, es imperioso acabar con los estereotipos que soportan los mayores de 50, 55 o 60 años.
Sobre el autor:
Pepa Montero
Pepa Montero es redactora especializada en temas de economía. Ha trabajado en medios como El Economista y La Gaceta de los Negocios. Es autora del libro de relatos La casa de las palmeras (Azul como la Naranja, 2013).