Las picaduras de insectos y ácaros resultan de lo más molestas, sobre todo por las complicaciones que solemos tener que hacer frente para acabar con todos ellos. En concreto, las chinches se han convertido los últimos días en un verdadero problema en París, afectando a transporte público, escuelas, cines e incluso hospitales. Pero, además, el miedo a que esta plaga se propague por otros países y llegue a Reino Unido, Italia o España es cada vez mayor.
La Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (ANECPLA) ya alertaba el pasado mes de septiembre de un posible repunte de plagas de mosquitos, cucarachas y ratas tras el paso de la DANA en España, debido a la acumulación de agua, las altas temperaturas posteriores y la humedad.
Saber cómo protegerse de estos insectos y ácaros, y lo más importante, prevenir sus picaduras antes de que se produzcan, tanto en el interior como al aire libre, nos ayudará a evitar el problema que pueden llegar a presentar más tarde.
Chinches, garrapatas y mosquitos
Lo primero es diferenciarlos para poder hacerles frente satisfactoriamente, y es que no todos actúan y reaccionan igual. En el caso de las chinches, esos pequeños insectos de color marrón, se alimentan de sangre humana y sus picaduras pueden llegar a provocar reacciones graves en la piel, incluso reacciones alérgicas, aunque no suelen transmitir enfermedades. Pueden picar en cualquier parte del cuerpo, pero especialmente en manos, brazos, piernas y cuello, dejando una pequeña mancha roja en la piel, ligeramente más oscura en el centro.
Se suelen esconder en las rendijas de colchones, los somieres u objetos de alrededor, en los pliegues y las costuras de ropa o maletas también. Ten en cuenta que se reproducen con mucha rapidez, por lo que no solo son difíciles de detectar, también de eliminar.
La mejor forma de prevenir su aparición, y evitar así sus molestas picaduras, es identificar cuanto antes la existencia de picaduras; examinar los colchones, los muebles cercanos a la cama y otros rincones, así como la ropa y las maletas (es posible que encontremos pequeños rastros de sangre o manchas oscuras, que nos indicarán su presencia); y usar fundas de colchón anti chinches, las cuales llevan impregnación para prevenirlas, aconsejan desde la multinacional especializada en control de plagas e higiene ambiental Rentokil Initial y otros blogs especializados.
Por otro lado, las garrapatas son unos ácaros que pueden transmitir gran cantidad de enfermedades infecciosas, aunque su picadura no es dolorosa y provoca enrojecimiento, hinchazón o una pequeña llaga en la piel. También se alimentan de la sangre, ya sea de los animales o las personas. Se encuentran, por lo general, en zonas de mucha vegetación.
No pican inmediatamente, sino que se enganchan a la ropa para, después, moverse a zonas más íntimas, como las axilas, las ingles o el cuero cabelludo. Esto nos dará una mejor oportunidad para detectarlas a tiempo y evitar su picadura.
Las recomendaciones para evitarlas suelen centrarse en utilizar ropa adecuada, de manga larga, ajustada y de color claro (para poder identificarlos mejor) cuando salgamos al campo. También utilizar botas cerradas y calcetines, y llevar el pelo recogido. Más allá de la ropa, es aconsejable caminar por laszonas centrales de los caminos y evitar la vegetación de los laterales y las zonas con humedad edáfica muy alta, como cursos de agua o encharcadizas. Del mismo modo, deberemos evitar sentarnos en el suelo en zonas de mucha vegetación, utilizar repelentes autorizados y productos desparasitarios, en el caso de las mascotas. Examinar todo el cuerpo y lavar la ropa utilizada con agua caliente también ayudará a evitar la presencia de estos ácaros, advertía Fernando de la Calle, especialista en la Unidad de Patología Importada y Salud Internacional del Hospital La Paz.
Por último, insectos como los mosquitos, que pican para extraer sangre, provocando un pequeño bulto y picazón, se propagan mucho mejor con el calor.
Para evitar su presencia y su posible picadura, la mayoría de las veces simplemente molesta, también será de utilidad cubrir la piel expuesta con mangas largas, usar colores claros y repelente antimosquitos si nos encontramos al aire libre. Más allá de esto, usar insecticidas en espray o aerosol suelen ser las prácticas más eficaces para evitar su presencia, así como emplear mosquiteras para evitar que entren en las casas.
Sobre el autor:
María Bonillo
María Bonillo es licenciada en Comunicación Audiovisual y Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Escribe principalmente sobre temas de sociedad. También tiene experiencia en comunicación corporativa de empresas como OmnicomPRGroup y Pentación Espectáculos.