Consejos para evitar los hongos en los pies este verano

En verano aumentan las probabilidades de padecer hongos, debido a la subida de las temperaturas, la humedad y el tiempo que pasamos en piscinas comunitarias y gimnasios. Se trata de una de las patologías que más afecta a los pies en esta época del año, ya que estamos más expuestos a lugares concurridos y húmedos donde solemos caminar descalzos. 

Los síntomas más comunes de las infecciones por hongos son los siguientes: picores constantes en el pie, rojeces, descamaciones en la piel, sensación de quemazón y mal olor, especialmente entre los dedos y los pliegues. 

Desde QuirónSalud (@quironsalud.es) señalan que, en su mayoría, las infecciones por hongos son leves y se tratan con cremas de uso tópico o, en los casos más graves, mediante fármacos orales en los casos más graves. Sin embargo, hay algunas medidas que podemos tomar para evitar este tipo de infección o disminuir el riesgo de contraerlas.

Mantener los pies limpios y secos

Los calcetines y los zapatos cerrados no desaparecen en verano. Su uso sigue siendo común, por ejemplo en lugares de trabajo, por lo que es importante utilizar un tejido transpirable y de algodón, así como otros productos naturales para los calcetines que permitan disminuir la sudoración. Deberemos también mantener una correcta higiene en nuestros pies y cambiarse de calcetines todos los días. 

Evitar compartir zapatos, calcetines o productos de higiene

Compartir zapatos, calcetines o productos de higiene entre diferentes personas puede aumentar el riesgo de infección por hongos, ya que es posible que estos vivan en las superficies de limas, cortaúñas, calcetines o zapatos.

Ventilar los zapatos

También es importante ventilar adecuadamente el calzado que utilicemos, sobre todo si hemos hecho deporte. Será una forma de evitar que la combinación de sudor y calor propicie la aparición de hongos. 

Evitar caminar descalzos en sitios públicos

En verano es habitual caminar descalzo por sitios públicos, como duchas o piscinas, una práctica que es mejor evitar ya que son sitios en los que existe una mayor probabilidad de infectarse al tratarse de espacios con constante humedad por las que circulan gran cantidad de personas. Por ello, lo mejor será utilizar chanclas en estos lugares.

No cubrir la infección con esmalte de uñas

Si la infección se produce en una uña, es recomendable no cubrirla con esmalte para disimularla, sino que hay que tratarla. Además, hay que tener en cuenta que si otra persona utilizar ese mismo pintauñas, podría infectarse también. 

Visitar a un podólogo

Es recomendable acudir a un especialista si sufrimos algunos de los síntomas mencionados, así podremos asegurarnos de que se trata de un hongo y recibir el tratamiento adecuado para acabar con la infección lo antes posible.