Mariola Báez
Consejos
Medicamentos que pueden ser buenos para ti, pero tóxicos para tu mascota
Mariola Báez
Sábado 14 de marzo de 2020
ACTUALIZADO : Sábado 14 de marzo de 2020 a las 6:30 H
3 minutos
Igual que no debes automedicarte, tampoco puedes dar a tu perro fármacos sin indicación veterinaria
Las mascotas forman parte de la familia y si notamos que se encuentran mal, con toda la buena intención del mundo, procuramos darle aquello que creemos puede aliviarle. Medio paracetamol o un ibuprofeno si se ha dado un golpe, seguro que le hará bien… pues no. El organismo y el ritmo metabólico de absorción de los medicamentos en perros y gatos son distintos a los humanos y lo que puede resultar un gran alivio para nosotros, puede provocar daños importantes en órganos vitales de los animales.
Según la Facultad de Veterinaria de la Universidad Cardenal Herrera (CEU) de Valencia, los medicamentos humanos son una de las principales fuentes de posible intoxicación en perros y gatos que acuden por este motivo a clínicas y hospitales veterinarios, bien porque sus dueños se los han administrado intentando proporcionarles alivio, o bien porque los han ingerido de manera accidental.
Qué fármacos son los más peligrosos para los animales
En el caso de intoxicación por fármacos, muchas veces el problema radica en no conocer las dosis exactas que harían que esa medicina no resultase dañina. Paracetamol, ibuprofeno o aspirina pueden actuar como auténticos venenos para mascotas, en determinadas situaciones de ingesta en dosis elevadas.
Es el caso del paracetamol, uno de los medicamentos habituales en cualquier botiquín casero. La dosis terapéutica no perjudicial rondaría, según indican expertos veterinarios, los 15 mg/kg, una cantidad superior podría causar daños importantes en el hígado y también provocar hemólisis (destrucción de glóbulos rojos). Los gatos son especialmente sensibles a este fármaco y tomarlo en exceso podría causarles ulceraciones en el estómago y hemorragias internas.
También el ibuprofeno, de uso tan extendido, puede ser muy perjudicial para una mascota. Hay que insistir en que los medicamentos humanos no están basados en los mismos principios activos que los que incluyen aquellos elaborados específicamente para perros o gatos. Este antiinflamatorio puede resultar tóxico para perros y gatos en dosis relativamente bajas. Vómitos, diarreas, temblores… son algunos síntomas que indican una posible intoxicación, que requiere consulta veterinaria urgente si existe sospecha.
Otros antiinflamatorios no esteroides (AINEs) como la popular aspirina, también pueden resultar igualmente peligrosos, causando graves trastornos estomacales en perros y gatos. Las mascotas tienen medicamentos específicos, ideales para mejorar síntomas dolorosos sin poner en riesgo su salud.
Especial atención merecen los medicamentos de efectos tranquilizantes. No des nunca a tu mascota fármacos que contengan benzodiacepinas, porque además de las repercusiones perjudiciales para el riñón y el sistema digestivo, podrían provovarle el efecto contrario, es decir, lejos de tranquilizarle, podría aumentar su nerviosismo y acabar padeciendo taquicardias u otras peligrosas afecciones.
Recuerda: como norma general, tus medicinas no valen para tu perro o tu gato. Ante cualquier duda, pregunta a tu veterinario antes de provocar un daño serio a ese animal al que solo pretendes cuidar con todo tu cariño.