¿Es necesario contratar un abogado especializado en herencias?

Las herencias pueden a veces ser procesos complejos que implican trámites burocráticos y un asesoramiento profesional si desconocemos cómo funcionan. Para resolver casos tan específicos, de los que normalmente no tenemos conocimientos precisos, se suele recomendar acudir a un abogado especializado en herencias. Estos procedimientos pueden complicarse si la persona que ha fallecido no ha dejado testamento o por el contrario lo ha hecho pero no tiene un valor legal. Se pueden presentar muchos supuestos y es posible que si no sabemos qué hacer perdamos derechos por tener un desconocimiento de los mismos.

Razones para recurrir a él

Desde el mismo momento en el que fallece una persona, comienza el proceso de sucesión, en el que hay una serie de impuestos de por medio, y otras cuestiones hasta que finalmente se produce la aceptación del testamento, siempre que este exista. Pero para llegar a ello es necesario cumplir una serie de requisitos legales que quizá no se dan en nuestro caso particular, lo que puede hacer que la herencia se transforme en un asunto largo y complicado.

Podemos encontrarnos antes gran cantidad de supuestos en los que probablemente no sepamos cómo actuar. Si por ejemplo no hay un testamento, un abogado especializado nos explicará qué es lo que se debe hacer y los plazos que existen para hacer el reparto correspondiente si por ejemplo son varios los herederos, así como de qué tiempo disponemos para abonar las tasas estipuladas.

En otras ocasiones el testamento puede estar en regla, sin embargo puede incurrir en algún tipo de vulneración de los derechos legítimos de una persona o generar algún tipo de conflicto entre los herederos.

Si son varias las personas involucradas en la herencia es necesario partir de lo contemplado en la ley en este sentido, algo que los abogados especializados nos pueden aclarar. Por ello, siempre es aconsejable hacer un testamento en vida que deje bien contemplados todos los aspectos en lo relativo a la repartición de bienes, y así dejar zanjada esta cuestión sin generar ningún tipo de perjuicio.

Cuando se produce un fallecimiento son necesarios una serie de trámites que pueden llevar a cabo estos profesionales. Las tramitaciones comprenden los testamentos o intestados, es decir cuando aquellos no existen, el proceso para el certificado de últimas voluntades, que es un documento obligatorio para tener conocimiento de la existencia o no del testamento, los impuestos de sucesión o donación… Precisamente este último aspecto es uno de los que más preocupa a los herederos, ya que se han de abonar en un periodo que no puede sobrepasar los seis meses.

Si no se cumplen los plazos o no se sabe qué hacer, es posible que se produzcan verdaderos problemas con la Agencia Tributaria, y esto provocará que los procesos se compliquen más.

En qué fijarse

Antes de dar el paso y decantarte por contratar un servicio de estas características deberás fijarte en una serie de aspectos. Uno de los más importantes es tener referencias sobre el trabajo previo desarrollado por ese abogado especializado. Es decir, es vital que sea una persona que tenga una experiencia anterior y que sea algo que pueda justificar. Este tipo de situaciones se tornan a veces en asuntos muy complicados que necesitan de unos amplios conocimientos en la materia. Una forma de comprobarlo es viendo la tasa de éxito que el abogado que nos interesa ha tenido en este tipo de asuntos relacionados con los conflictos de herencias.

Al mismo tiempo, es vital que la comunicación entre abogado y cliente fluya. Aquel debe preocuparse por informar detenidamente de cómo va el proceso, del avance de la situación y explicar qué pasos se van a dar y los motivos. El asesoramiento debe ser continuo y el cliente no ha de quedarse nunca con la sensación de desamparo o de no saber qué está ocurriendo con su herencia. Nos debe aconsejar y también ofrecernos todas las alternativas que hay, con sus pros y contras, para ver qué es lo que nos conviene hacer o qué es lo que nosotros decidimos en función de todas las informaciones objetivas recibidas por parte del experto.

Por supuesto, la confidencialidad es otro de los elementos fundamentales que debe respetar un abogado. Todo lo que se habla con este profesional ha de quedar bajo secreto profesional y no debe salir de su despacho. Si desconfiamos en este sentido, lo mejor es consultar a otro.

El hecho de acudir a un experto puede suponer un ahorro de tiempo, de dinero e incluso puede impedir que vayamos a juicio, lo que puede suponer que todo se ralentice demasiado, además del coste adicional que esto conlleva. A veces hay que saber cómo agilizar los trámites, y esto es más probable que lo sepa alguien acostumbrado a mantener este tipo de litigios, que quien no está acostumbrado y que ante situaciones nuevas puede no saber reaccionar a tiempo.

Por último, como siempre antes de decantarnos por un abogado especializado en herencias o en cualquier otro asunto, debemos fijar los honorarios y firmar un contrato en donde queden contempladas todas estas cuestiones.