Teresa Rey
Consejos
¡SOS, nietos adolescentes! ¿Sabes cómo debes actuar?
Teresa Rey
Foto: Bigstock
Lunes 9 de diciembre de 2019
ACTUALIZADO : Lunes 9 de diciembre de 2019 a las 6:55 H
3 minutos
En esta etapa la forma de interactuar con los abuelos adquiere una dimensión diferente, pero no peor
La adolescencia es una época de cambios; en esta etapa de la vida el núcleo de amistades comienza a adquirir otra dimensión, se le otorga más importancia, y el ámbito familiar pasa a un segundo plano. Este proceso hacia la madurez por el que pasan los jóvenes provoca que la forma de interactuar con los abuelos adquiera una dimensión diferente. Sin embargo, los expertos aseguran que aunque se produzca un distanciamiento, las relaciones entre los abuelos y los nietos adolescentes no tienen por qué verse afectadas en su esencia.
Cambios en el trato
Según diversos estudios se ha demostrado que la relación entre abuelos y nietos va cambiando a medida que pasa el tiempo y en función de las edades de ambos grupos. Por ejemplo se ha demostrado que en general cuando la persona mayor es relativamente joven disfruta especialmente con los nietos pequeños. Sin embargo, a medida que estos crecen el vínculo adquiere otra perspectiva.
Los jóvenes se están preparando para entrar en la vida adulta y este cúmulo de sensaciones y vivencias provoca que proyecten sus intereses fuera del círculo familiar. Pero esto provocará que en el futuro, al alcanzar la madurez, el trato con sus abuelos sea más estable, satisfactorio y voluntario. Es un proceso natural de la vida.
Las investigaciones indican que los adolescentes ven a los padres de sus progenitores como personas influyentes en su vida tanto en el ámbito personal como en el académico. El afecto y el respeto hacia ellos se mantienen impolutos y no varían durante este periodo.
Ahora bien, tenemos que ser conscientes de que las actividades que realicemos con ellos no van a ser las mismas que cuando eran pequeños. Evidentemente han crecido y ahora sus preferencias y formas de ocio son otras, pero hay que respetarles y dejarles que sigan su camino. Lo importante es saber que ellos siguen sintiendo aprecio hacia esos mayores que han estado con ellos desde que vinieron a este mundo de un modo y otro.
Conversaciones profundas
En este sentido cabe destacar que los adolescentes valoran positivamente las conversaciones que mantienen con ellos. Según la investigación Grandparents and Grandchildren in Poland, realizado por la investigadora polaca M.Tyszkowa, estos diálogos con nietos adolescentes o jóvenes adultos adquieren una dimensión de intimidad especial ya que los padres están “muy atareados” para atenderles y esto provoca que a la vez hablen sobre temas que no abordan con sus progenitores. Además, estos contactos se producen en una atmósfera de paz y entendimiento, cosa que en ocasiones no sucede con aquellos.
En conclusión, se trata de aceptar la nueva etapa por la que están pasando los jóvenes y entender ese momento especial. Una circunstancia que cambiará algunos aspectos de la relación entre abuelos y nietos, pero que no tiene por qué interferir en los sentimientos ni en la verdadera esencia de esta unión familiar.