¿Tu perro hace sus necesidades dentro de casa? Evítalo con estas recomendaciones

Nuestro fiel amigo no solo necesita mucho cariño y cuidados, sino también su dosis de educación para que no sea una animal desobediente y aprenda lo que tiene que hacer en cada momento. Especialmente cuando son cachorros.

Muchas de las batallas de los dueños de los perros es lograr que sus mascotas no hagan las necesidades por cualquier rincón de la casa, sobre todo si estamos hablando de esa cara alfombra o de ese sofá que acabamos de comprar. Por ello, os enseñamos una serie de trucos para que aprendan donde tienen que depositar su orina y excrementos. 

Todo aprendizaje lleva su tiempo

Pero, antes de nada, es esencial que recuerdes este consejo: enseñar buenos hábitos a una mascota requiere de disciplina y mucha paciencia por tu parte. No lo lograrás de un día para otro, así que no desesperes. Lo conseguirás al cabo de unas semanas. 

Y mientras dura ese entrenamiento, mantén la positividad. No le regañes si le cuesta un poco más de tiempo orinar fuera de casa, ya que conseguirás el efecto totalmente contrario. Lo que sí puedes hacer es reforzar con palabras amables, caricias o alguna que otra golosina, sus avances. 

Observa sus rutinas 

De forma previa, es importante que vigiles el comportamiento de tu mascota en relación con su higiene. ¿Cada cuánto tiempo hace sus necesidades? ¿Ves que hace círculos y huele antes de mear? Cuando notes estas señales, quizá sea el momento de sacarle a la calle para que vaya comprendiendo esa nueva rutina. Resultará agotador pero satisfactorio a largo plazo. 

Puedes darle la orden de que haga pis y esperar, tranquilamente, a que lo haga. Pero, repetimos, se debe ser firme, pero no con reprimendas ni malos modos. Es un animal, pero también se merece un respeto. 

¿Y si todo obedece a una enfermedad?

En ocasiones, este comportamiento de los animales de orinar donde no deben responde a un problema de salud más que mal hábito. Así, puede ser que el animal haya comido algo en mal estado, que presente ciertas alteraciones neurológicas que hagan que se despiste o que, bien, tenga episodios de estrés o ansiedad si le habéis dejado a cargo de alguien durante vuestras vacaciones familiares. 

En cualquier caso, nunca está de más consultar con tu veterinario para descartar problemas mayores.

Cubo y fregona

Mientras dure este lento proceso, no será ni una ni dos las veces que tendrás que limpiar restos de orina y heces en tu hogar. Eso sí, esmérate mucho con la higiene en esas zonas para evitar molestos olores y para que tu animal de compañía no lo tome como su lugar favorito para hacer sus necesidades.