Con la llegada del verano no solo aparecen los mosquitos normales a los que estamos acostumbrados, sino que también hay otra variedad que llegó a nuestro país en 2004 y que puede causar más problemas de salud que las típicas picaduras que provocan hinchazon y picazón: el mosquito tigre.
La peligrosidad de este insecto es que es capaz de transmitir algunas enfermedades tropicales como el dengue, el chikungunya y el zika. Originario de Asia, la zona donde se encuentra con mayor presencia en la península es en el litoral mediterráneo.
La gran diferencia con los mosquitos normales es que estos sí tienen actividad diurna, que suele ser entre los meses de mayo a octubre. Además, la picadura también puede variar significativamente, así como las reacciones de nuestro cuerpo a ellas, como puede ser fiebre, dolor muscular, dolor articular y cansancio.
"Las reacciones son similares a las provocadas por el mosquito común (endurecimiento de la piel, enrojecimiento, picor local, etc) pero las del mosquito tigre son, normalmente, picaduras múltiples y mucho más dolorosas, debido a que hay mayor inflamación de la piel y requieren más días para su curación total. Pueden picar en cualquier parte del cuerpo, pero sobre todo en las piernas. Excepcionalmente, en pacientes alérgicos al veneno podría aparecer urticaria generalizada, e incluso shock anafiláctico", explica la doctora Clara Pérez Padilla, jefa de Alergología del Hospital Vithas Xanit en su página web.
¿Cómo actuar?
La picadura de un mosquito tigre puede no suponer un motivo de alarma en un primero momento pero, conforme pasen los días, notaremos que su duración es más prolongada que la del mosquito común y que los efectos son más severos. Sin embargo, si no conseguimos evitar su picadura, estas son las pautas a seguir más recomendadas:
Evitar rascarse en la medida de lo posible.
Aplicar hielo en la zona durante 10-15 minutos para tratar de bajar la inflamación.
Acudir al médico para que nos recete antihistamínicos orales, corticoides o antisépticos tópicos, e incluso antibióticos. No es recomendable utilizar los típicos antihistamínicos en cremas que suelen ofrecer en las farmacias.
Acudir a un alergólogo, quien podrá realizar un diagnóstico exacto de la picadura y determinar si nos ha contagiado alguna de las enfermedades señaladas.
Sobre el autor:
María Bonillo
María Bonillo es licenciada en Comunicación Audiovisual y Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Escribe principalmente sobre temas de sociedad. También tiene experiencia en comunicación corporativa de empresas como OmnicomPRGroup y Pentación Espectáculos.