Verónica Mollejo
Consejos
Plantas que sobreviven al invierno: consejos y cuidados especiales
El frío que trae consigo el invierno es el principal enemigo de tus plantas, pero no de todas
Al igual que ocurre con el calor, el frío propio del invierno puede causar estragos en tu jardín, pues las bajas temperaturas no establecen el mejor entorno para algunas especies de plantas. Un buen ejemplo de ello son los árboles que normalmente habitan en nuestras calles, cuyas hojas caen sin remedio con la llegada de dicha estación.
Sin embargo, tanto si quieres evitar este destino como si vives en una zona donde el frío es algo habitual, es preciso que sepas que existen algunas plantas que mantienen su belleza sin importar el clima o los fenómenos meteorológicos que nos acechen. Plantas cuya resistencia te permitirá tener un hogar de lo más vistoso y colorido durante todo el año. ¿Cuáles son las variedades que debes tener en cuenta en este sentido?
Un jardín perfecto, también en invierno
La mayoría de estas plantas son perfectas para esos rincones de tu jardín donde el sol apenas se deja ver y quedan ocultos por la sombra. Una situación que también puede echar a perder algunas especies, pero que en este caso no implica riesgo alguno. Bajo esta premisa, ¿qué plantas de exterior debes incluir en tu jardín para que este luzca siempre lo más bonito posible?
- Ciclamen. También conocida como violeta persa, esta planta con flor es una de las mejores opciones para dar algo de alegría a tu jardín, pues luce en todo su esplendor durante los meses de invierno. Sus coloridos tallos pueden llegar a alcanzar los 40 centímetros de altura, sin embargo, para ello necesita cierto espacio, por lo que deberás plantarla en una zona que no esté demasiado poblada por otras especies. El riego debe ser moderado y con agua templada, mientras que no puede darle la luz y el sol directamente, de lo contrario se quemará por completo.
- Narciso. En contra de lo que muchos piensan, y como demuestra también el ciclamen, en invierno hay plantas que florecen. Otro ejemplo de ello es el narciso, una especie más propia de la primavera, pero que resiste muy bien las bajas temperaturas, permitiendo que sus pétalos comiencen a asomarse durante esta temporada. Riégala a menudo, colócala en un lugar con poca iluminación y cuando las flores se marchiten, córtalas de inmediato.
- Hidra. Una de las plantas más frecuentes en este tipo de jardines, debido al efecto salvaje que aporta a la estancia. La hidra trepadora tolera muy bien la falta de luz, no necesita mucha cantidad de agua y resiste temperaturas que van por debajo de los 0ºC. Incluso sobreviven a las heladas que ponen en jaque a algunos puntos de España. Eso sí, si acabas de plantarla o apenas tiene un par de años, deberás proporcionarle una protección extra.
- Crisantemo. Además de la gran variedad de crisantemos que existen en el mercado, capaces de transformar tu jardín por completo, se trata de una planta que florece con la llegada del otoño y cuya temperatura ideal oscila entre los 10ºC y los 15ºC. A diferencia de la hidra, esta especie no soporta las heladas, pero sí el frío y la sombra, aunque necesita recibir un poco de luz natural.
- Lavanda. Una de las más versátiles y populares entre los amantes de la jardinería. ¿El motivo? Su increíble aroma, el color morado que deleita nuestra vista y las propiedades medicinales que se le atribuyen como, por ejemplo, disminuir el estrés, reducir la inflamación o ayudar a conciliar el sueño. Y, por si esto fuera poco, su carácter silvestre la convierte en una planta muy resistente al mal tiempo, siendo capaz de adaptarse a cualquier tipo de terreno. No obstante, sí le viene bien recibir la luz del sol directamente, al igual que una poda frecuente.
- Acebo. La mayoría de gente conoce esta planta por ser un símbolo tradicional de la Navidad, así como un imán de buena suerte. Quizás por eso es una de las especies que mejor sobrellevan el invierno. Este arbusto, que destaca por la presencia de unos vistosos frutos rojos, necesita estar expuesto a la brisa que atraviese tu jardín, mucha sombra y aún más humedad. La única pega es que es muy sensible a las plagas, sobre todo en primavera y verano.
- Geranio. Otra de las especies más populares, pues lidera millones de balcones y jardines a lo largo de todo el país. Aunque es capaz de sobrevivir al invierno en perfecto estado, sí necesita estar algunas horas bajo el sol, mientras que el riego es un aspecto que no deberás controlar tanto. Lo único que tendrás que hacer con la llegada del frío será podar sus ramas para favorecer la floración.
- Verónica. Conocida también como hebe, estamos ante una de las mejores opciones para esta época del año, pues tolera unas temperaturas que rondan los 10ºC y no requiere mucha agua. Al menos en invierno, pues en verano el riego debe ser abundante. Además, agradece mucho la acción del sol, dando como resultado unas vistosas flores de color morado, rojo, rosa o blanco.