Si me sancionan con mi coche en el extranjero, ¿llegará la multa de tráfico a casa?

Como no saben la dirección de casa, no hay problema. Puede que esto sea lo primero que pienses cuando te ponen una multa fuera de tu país. Sin embargo, es un error, ya que da igual donde se cometa la infracción al volante: sí o sí tendrás que hacer frente a ello.

Así pues, para despejar todas tus dudas en este sentido, a continuación descubrimos todo lo relativo con las sanciones que te pueden imponer en otro país que no sea España. Algo que ocurre con mayor frecuencia durante la época estival.

Te llegará a tu domicilio

Por increíble que pueda parecer, las multas cometidas en el extranjero sí pueden llegar a tu domicilio. Si, por ejemplo, estás de vacaciones en el sur de Italia y cometes una infracción por saltarte un semáforo en rojo, tarde o temprano te notificarán que hay una multa cursada que debes abonar. Y es que conducir por los países de la Unión Europea es como si lo estuvieses haciendo por la provincia de Córdoba, por poner un símil claro.

En este sentido, da lo mismo que la falta la haya registrado un agente de la policía que un radar. Se puede denunciar a un vehículo extranjero gracias a su matrícula. Una nueva normativa impuesta por las autoridades europeas en Bruselas para evitar que los turistas extranjeros tengan cierta "impunidad" a la hora de conducir fuera de su territorio. Una directiva legislativa que facilita el intercambio de información entre países comunitarios sobre todo tipo de cuestiones de tráfico y seguridad vial.

Estas sanciones se aplicarán, si cometes ese delito, en relación a un exceso de velocidad, si superas la tasa de alcohol permitida o no llevas puesto el cinturón de seguridad o el casco obligatorio. También te expones a que te multen si no respetas las señales de tráfico, circulas de forma indebida o por donde no debes, o usas el teléfono móvil mientras estás al volante. 

Si te suenan alguna de estas faltas, como explican desde la asociación de Automovilistas Europeos Asociados (@aeaclub), te llegará una notificación a tu domicilio por medio de correo certificado y en tu mismo idioma para que sepas de qué se trata. En el caso de que sea una sanción por un hecho grave, la cuantía a pagar dependerá de las tasas establecidas en el territorio donde cometiste la infracción. Al hilo de esto último, es bueno recordarte que no todos los países cuentan con el sistema de carnet por puntos, por lo que puede que la multa no te afecte en dicho sentido. 

La ley te obliga a pagar

No abonar la multa también acarrea una serie de consecuencias parecidas a si hicieras lo mismo en España. Si te llega la sanción por un procedimiento administrativo y te desentiendes a la hora de hacerte cargo del importe, te llegará de nuevo dicha notificación. Sin embargo, en este caso por la vía judicial. Una situación algo más seria y comprometida si mantienes tu postura de abonar esa infracción de tráfico. 

Pero antes de hacerlo, como debería ser sin esperar a que la reclamen de nuevo, sería bueno que comprobases que no hay ningún error y que entiendes todo lo que se explica en el documento. Una hoja donde también se indica la forma de pagar la multa, así como los descuentos a los que puedes acceder si lo haces lo antes posible.

En el caso de que no estés de acuerdo con la sentencia de tráfico, en la misma notificación se detalla el procedimiento para impugnarla. 

Estas son las recomendaciones de los expertos, pero si de verdad no quieres llevarte sorpresas desagradables a la vuelta de tus vacaciones, lo mejor es que antes te informes muy bien de la normativa en materia de circulación de cada país. Sobre todo si tienes previsto moverte por dicho destino en tu coche particular o bien con un vehículo de alquiler. En definitiva, cumplir las normas, al igual que haces en España, será una garantía para que tengas un viaje seguro.

Lo mismo pasa con los extranjeros en España

Por las carreteras españolas, los más imprudentes al volante son precisamente los vecinos: franceses y portugueses. Así, durante el año 2018, del que se tienen datos, la Dirección General de Tráfico (@DGTes) tramitó más de 170.000 multas por exceso de velocidad a coches cuya matrícula era de otros estados de la Unión Europea. Una cifra que supone algo más del 7% de las que se ponen al cabo del año en España por pisar demasiado el acelerador.

Una lista negra de infractores donde también aparecen ingleses, alemanes e italianos, coincidiendo con las nacionalidades de los turistas que cada año visitan el territorio y, sobre todo, las costas españolas. Precisamente, el periodo de mayo a octubre (y agosto en mayor medida) es cuando se produce un repunte de estas sanciones de tráfico. Unas faltas que se cometen pensando que no pasará nada.