Victoria Herrero
Consejos
Sigue estos sencillos trucos caseros para limpiar los objetos de plata y oro
Victoria Herrero
Lunes 9 de diciembre de 2019
ACTUALIZADO : Lunes 9 de diciembre de 2019 a las 6:57 H
3 minutos
Pasta de dientes, detergente de los platos o bicarbonato nos pueden servir como remedios caseros
Una antigua cubertería de herencia familiar, anillos o pulseras como regalo de compromiso o bandejas de plata como obsequio al jubilarnos tras muchos años de trabajo. Son objetos de oro y plata que guardamos en casa, con valor sentimental y material que, sin el debido cuidado asiduo, pueden llegar a oscurecerse, estropearse y no ser ni la sombra de lo que fueron en su día.
A continuación exponemos una serie de consejos para limpiar dichos objetos. Recomendaciones más indicadas para aquellas piezas macizas que no están revestidas de ningún baño o que no tienen otro tipo de piedras preciosas en cuyo caso lo mejor es consultar con un joyero profesional.
Devolver el brillo natural a piezas de oro
Uno de los trucos para las joyas y objetos de este material es llenar un recipiente con agua tibia y agregarle un poco del producto que usamos normalmente para fregar los platos. Introducimos esos objetos y los dejamos durante las horas necesarias hasta que veamos que esa suciedad se vaya ablandando; suciedad que quitaremos, a continuación, con un cepillo suave para ir frotando cada pieza. Una vez limpias, las volvemos a introducir en el agua y las secamos con un paño suave.
Otro de los remedios caseros es emplear pasta de dientes para frotar con ella una cadena de oro, por ejemplo, y devolverle su brillo de antaño. Cuando termines, solo tienes que enjuagarla y envolverla en un trapo delicado. Si, por el contrario, nuestra pieza es de oro blanco, el mejor consejo es limpiarla con una clara de huevo batida. Lo dejamos secar el tiempo necesario y retiramos los restos con un paño hasta que el brillo natural vuelva a ser el original.
¿Cómo limpiamos la plata?
La exposición al polvo y a otros elementos ambientales hace que, en ocasiones, la plata se oscurezca con el paso del tiempo y pierda ese esplendor del que hacía gala hace décadas. Por ello, conviene mantenerla de vez en cuando gracias a estos fáciles trucos que mostramos a continuación:
- Bicarbonato de sodio. Crea una pasta con este elemento y agua tibia y frota por toda la superficie que debas limpiar de forma suave con los dedos. Cuando termines, enjuágala con agua templada y sécala con un paño suave. Una operación que se puede hacer incluso añadiendo unas gotitas de vinagre a esta solución "mágica".
- Truco casero con sal, agua y papel de aluminio. Llena un recipiente con agua caliente y añade una cucharada de sal. Coge un poco de papel de aluminio, mételo en el fondo del agua e introduce esas joyas u objetos de plata. Pasados unos minutos, saca las piezas y enjuágalas y quítales el exceso de agua.
- Con limón y sal podemos pulir la plata y devolverle su brillo. Para ello, corta medio limón, úntalo de sal y frota ese objeto en cuestión. Déjalo actuar unos minutos y limpia los restos.