Verónica Mollejo
Consejos
Trucos para poder dormir bien en verano sin tener que encender el aire acondicionado
Verónica Mollejo
Foto: Bigstockphoto
Jueves 18 de agosto de 2022
ACTUALIZADO : Jueves 18 de agosto de 2022 a las 12:23 H
3 minutos
Muchas personas tienen problemas para conciliar y mantener el sueño debido al calor veraniego
En verano, el gasto de aire acondicionado puede alcanzar cotas sorprendentes, sobre todo en aquellos puntos de España donde las temperaturas rondan algunas noches los 30 grados. En estas situaciones, ante la incapacidad para conciliar o mantener el sueño y, por consiguiente, evitar que esto afecte a la rutina diaria; muchas personas encienden el aire acondicionado durante toda la noche, dejando de lado lo que esto supone para su salud y su bolsillo.
Y es que tener activado este aparato tantas horas seguidas, en especial si dirige el aire directamente hacia a ti, puede provocar dolor de cabeza, sequedad o irritación en los ojos, alergias, refriados, dermatitis o incluso infecciones respiratorias. Por estos y otros muchos motivos, los expertos recomiendan recurrir a otras técnicas para desconectar el aire acondicionado, al menos, durante el descanso nocturno, evitando así un sinfín de problemas. ¿Cómo puedes conseguirlo sin "morir" de calor en el intento?
Olvida las duchas de agua fría
Sabemos que a veces resulta imprescindible para sobrevivir al calor sofocante del verano. Sin embargo, darse una ducha con agua fría antes de dormir puede ser contraproducente. Esto se debe al efecto vasoconstrictor del agua fría, que provoca que la temperatura de la piel ascienda más rápidamente, al igual que tu sensación térmica. Por lo tanto, siempre es mejor recurrir al agua templada, más adelante lo agradecerás.
Las sábanas en el congelador
Puede parecer un truco demasiado extremo, pero es sumamente eficaz. Muchas personas meten las sábanas en una bolsa de plástico y, a su vez, en la nevera durante todo el día, para después colocarlas antes de ir a dormir. De esta forma, la cama estará fresca el tiempo suficiente para conciliar el sueño. Por otro lado, los expertos aconsejan comprar siempre sábanas de algodón, pues son más transpirables.
Cierra la habitación a cal y canto
Tienes que evitar a toda costa que la habitación donde duermes se caliente durante el día. Para ello, se recomienda cerrar la puerta y las ventanas, así como bajar las persianas, mientras haya todavía un rayo de sol. Al caer la noche y debido al aislamiento, la temperatura será más agradable. Un efecto que podrás multiplicar si, además, abres de nuevo todo y creas una pequeña corriente de aire que refrigere toda la casa.
Hielo frente a la ventana
Si eres de los que duermen con la ventana abierta o, en su defecto, con un ventilador, un truco muy recurrente es colocar delante de la fuente de aire un recipiente con hielo a la altura de la cama. De esta forma, sentirás que dicha corriente llega un poco más fresca de lo normal. Al menos hasta que los hielos se derritan, un tiempo más que suficiente para conciliar el sueño.