¿Cómo gestionan el diálogo intergeneracional las organizaciones murcianas? ¿Valoran las empresas de la Región de Murcia el talento sénior y a los trabajadores de mayor edad? ¿Qué medidas se están poniendo en marcha en la capital de la región para favorecer a los mayores en el ámbito laboral?
Estas son algunas de las cuestiones a las que ha respondido Miguel López Abad, presidente de la Cámara de Comercio de Murcia (@camaramurcia), que presentará junto a 65YMÁS (@65ymuchomas) este martes 29 de noviembre en la capital murciana, la campaña de puesta en valor del talento intergeneracional 'Aprender de la experiencia', una iniciativa impulsada por la Cámara de Comercio de España (@camarascomercio) en colaboración con el diario líder del segmento sénior.
Durante la presentación, que tendrá lugar en el salón de actos de la Cámara, el exjugador de baloncesto Fernando Romay participará en una mesa de debate sobre habilidades sociales y cómo puede enriquecer la empresa la apuesta por el talento y el diálogo intergeneracional. Además, intervendrán Marcos Ortuño, consejero de Presidencia, Turismo y Deporte de la Región de Murcia, Francisco Valle, consejero delegado de 65YMÁS, así como el propio López Abad.
PREGUNTA.- ¿Cree que en las empresas murcianas se pone en valor el talento sénior?
RESPUESTA.- Las empresas no dejan de ser un reflejo de la sociedad en la que se desenvuelven y, en este sentido, debemos pensar qué papel otorgamos a nuestros mayores hoy en día en los entornos familiares, laborales, de ocio, etc.
Por una parte, asistimos al llamado “edadismo”, una forma de discriminación social por cuestión de edad que afecta a muchas personas mayores; pero, a su vez, el hecho de visibilizarlo, incluso darle un nombre, es una forma de reflexión y avance como sociedad. El talento senior o el valor de nuestros mayores está ahí, puede aportar mucho a la sociedad, y por ello debemos mejorar los medios de fomentarlo y ponerlo en valor.
P.- En la actualidad, ¿considera que ha mejorado la situación de los mayores en las empresas con respecto a hace unos años o no ha cambiado mucho?
R.- Asistimos a cambios significativos. Por ejemplo, hasta hace relativamente poco tiempo el relevo generacional en una empresa familiar no se hacía con un proceso de planificación de fases y previsión de los diferentes escenarios, algo hoy en día muy extendido y que facilita ese relevo, donde generaciones diferentes se han enfrentado tantas veces por discrepancias de criterios, objetivos e incluso valores.
También ha cambiado, para bien, el papel de la persona mayor como consumidor pasivo, con campañas como la destinada a la banca que han dejado claro que son capaces de elevar su voz y recordarnos que no podemos olvidar a un colectivo tan significativo. Todo ello nos hace pensar que estamos en un proceso de evolución en el que, por supuesto, hay que seguir avanzando.
P.- ¿Qué medidas se están poniendo en marcha en Murcia para favorecer a los mayores en el entorno laboral?
R.- Hay mucho que hacer en ese ámbito, se echan en falta incentivos para alargar la vida laboral, lo que supondría contar con la experiencia acumulada de nuestro capital humano y, a su vez, responder a esos casos en los que un trabajador que ha alcanzado la edad de jubilación, desea seguir desarrollando su actividad.
P.- ¿Qué opina de las relaciones intergeneracionales en las empresas? ¿Cree que funcionan?
R.- En general sí, yo personalmente creo en ellas, aunque lógicamente hay mucha casuística. Lo que está claro es que deberían funcionar en beneficio no solo de la empresa, sino de la sociedad en su conjunto. Todo parte de que, además del ‘yo individual’, hay un ‘yo colectivo’, y esa concepción aplicada a la empresa, mejora su competitividad, su capacidad de crear empleo y retener el talento, y su compromiso social.
P.- ¿Qué pueden aportar los jóvenes a los seniors en el trabajo, y viceversa?
R.- Evidentemente, hay una fuerza, una energía y unas “ganas de comerte el mundo” en la juventud que luego, no digo que se pierda, pero sí que se atenúan. Bien canalizada, esta fuerza debe dar a las empresas iniciativa, creatividad y capacidad de adaptación a los cambios. Los seniors, por su parte, aportan años de conocimiento y experiencia académica, profesional o empresarial, que se suman a todas esas habilidades que vienen dadas por los años y que les permite “ver más allá”.
El ejemplo más palpable es el uso y aplicación de las tecnologías, a las que están mucho más acostumbradas las personas jóvenes, los nativos digitales, pero que deben situarse en una estrategia global y con un propósito determinado. En conclusión, si el objetivo es compartido, jóvenes y sénior podemos y debemos aprender los unos de los otros.
P.- En las empresas, ¿cree que cada vez se valora más las soft skills en los empleados? ¿Cuál de ellas es la más importante de adquirir?
R.- Las soft skills son imprescindibles en el desempeño de las empresas: el esfuerzo, el trabajo en equipo, la adaptabilidad y la creatividad de los recursos humanos son cada vez más apreciadas y buscadas en los procesos de selección de personal, que intentan por diferentes medios identificar y seleccionar a los candidatos que las tienen o que son capaces de desarrollarlas.
Aunque están muy interrelacionadas, si tuviera que priorizar alguna sería la del trabajo en equipo, que también necesita de un liderazgo claro para sacar lo mejor de cada integrante del grupo. En una empresa, el trabajo en equipo debe estar orientado a sumar las capacidades diversas de cada persona para generar el mejor resultado, que siempre será superior a la suma de las individualidades.
