Santiago Sesé: "Omitir a los sénior en los procesos de contratación es perder muchas posibilidades"

¿Cómo gestionan las empresas tinerfeñas las plantillas intergeneracionales? ¿valoran el talento sénior y a los trabajadores de mayor edad? ¿qué medios se están poniendo en marcha en Santa Cruz de Tenerife para favorecer a los mayores en el ámbito laboral?

Estas son algunas de las cuestiones a las que ha respondido Santiago Sesé, presidente de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife (@camaratenerife), que presentará junto a 65YMÁS (@65ymuchomas), este jueves 24 de noviembre en Santa Cruz de Tenerife, la campaña de puesta en valor del talento intergeneracional 'Aprender de la experiencia', una iniciativa impulsada por la Cámara de Comercio de España (@camarascomercio) en colaboración con el diario líder del segmento sénior.

Durante la presentación, que tendrá lugar en el Salón de Actos de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, el jugador de baloncesto Fernando Romay protagonizará una mesa de debate junto a Sara González Peña, administrativa, directora de eventos y exalumna del programa PICE; Natalia Rodríguez, Gestora de Talento del Grupo Fedola; y Maite Salazar, directora de Personas y Organización en Puertos de Tenerife, en la que hablarán sobre el valor de las relaciones intergeneracionales en los entornos laborales y que estará moderada por la periodista de 65YMÁS, Beatriz Torija.

PREGUNTA.- ¿Cree que las empresas de Canarias, y en concreto las de Tenerife, ponen en valor el talento sénior?

RESPUESTA.- Tanto en Tenerife como en el conjunto de Canarias, creo que las empresas valoran cada vez más la implantación de un modelo híbrido, donde perfiles junior y senior puedan trabajar de manera conjunta y retroalimentarse mutuamente. Las empresas saben apreciar el empuje y los aires renovadores que aportan los perfiles más jóvenes, que a su vez pueden verse guiados por la experiencia que caracteriza al talento sénior. Una correcta mezcla de ambos perfiles es la clave para el óptimo desarrollo de cualquier negocio.  

P.- En la actualidad, ¿considera que ha mejorado la situación de los mayores en las empresas con respecto a hace unos años? ¿O no ha cambiado mucho?

R.- Creo que cada vez se valora más positivamente la experiencia y el saber hacer propios de perfiles más mayores. Una persona que haya alcanzado su madurez profesional tiene una visión y un recorrido que enriquece no solo a sus propios compañeros, sino al conjunto de cualquier empresa. Por eso, creo que se produce una situación de ganar-ganar en la cual todos crecen: empresarios, trabajadores y los propios equipos profesionales. Si omitimos a este segmento de la población en nuestros procesos de contratación estaremos cerrándonos la puerta a innumerables posibilidades.

P.- ¿Qué medidas se están poniendo en marcha en Canarias – y en Tenerife en particular– para favorecer a los mayores en el entorno laboral?

R.- Mantener una formación constante es fundamental para cualquier perfil profesional, pero hoy en día los retos de digitalización e innovación a los que se enfrentan las empresas hacen que esta actualización de competencias profesionales sea especialmente relevante para los perfiles senior. Por eso, desde la Cámara trabajamos por ofrecer una elaborada oferta formativa que pretende dar respuesta a las necesidades detectadas por el sector, a través no solo de nuestro catálogo de cursos, sino también a través de iniciativas como el Programa 45+, que cuenta con la cofinanciación del Fondo Social Europeo y el Cabildo de Tenerife y cuyo objetivo no es otro que incrementar la empleabilidad de personas mayores de 45 años a través de la capacitación y la formación.

P.- ¿Qué opina de las relaciones intergeneracionales en las empresas? ¿Cree que funcionan?

R.- No solo funcionan, sino que también son necesarias. Contar con un equipo profesional con diferentes segmentos de edad (junior, mediana edad, senior, etc.) supone la posibilidad de que se nutran y complementen entre sí, aportando cada uno de ellos sus puntos fuertes y, sobre todo, cubriendo los puntos flacos que el resto de compañeros pueda tener. Lógicamente las diferencias de edad plantearán algunos retos, pero con una adecuada política de fomento del trabajo en equipo creo que una plantilla intergeneracional puede aportar grandes ventajas a cualquier empresa.  

P.- ¿Qué pueden aportar los jóvenes a los seniors en el trabajo, y viceversa?

R.- La juventud es dinámica, innovadora, digital, creativa, propositiva. Nos dan una mirada fresca y son más proclives a esta tendencia cada vez más necesaria de “pensar fuera de la caja”, a salirse de los márgenes establecidos y, desde una perspectiva diferente, aportar ideas u opiniones que permiten que cualquier equipo profesional o cualquier empresa avance.

Por su parte, los sénior cuentan con la serenidad, el conocimiento y la experiencia que solo la edad puede otorgar, y creo que su papel precisamente debe actuar a dos niveles: por un lado, atemperando el empuje que cualquier perfil joven puede tener por no tener una visión tan calculada de los riesgos; y por otro lado, creo que es necesario que los perfiles séniors se encarguen de transmitir esta experiencia y estos conocimientos adquiridos de modo que los perfiles jóvenes puedan aprender no solo más, sino también de una mejor forma. También pueden aportar muchos valores adquiridos durante su vida laboral como el esfuerzo, la humildad,….

P.- En las empresas, ¿cree que cada vez se valora más las soft skills en los empleados? ¿Cuál de ellas es la más importante de adquirir?

R.- Si bien creo que hasta ahora las soft skills han podido ser una asignatura pendiente, hoy en día creo que las empresas valoran cada vez más estas habilidades. De hecho así se evidencia año tras año en el Estudio de Necesidades Formativas de las Empresas que elaboramos desde la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, donde cada vez más las empresas echan en falta la existencia de soft skills en sus equipos profesionales.  

Habilidades como el trabajo en equipo o el trabajar la empatía tanto con clientes como con los propios compañeros creo que son especialmente necesarias para cualquier empresa. Asimismo, a mi juicio también es esencial que mantengamos una actitud positiva y propositiva, con buena predisposición hacia los retos que cualquier trabajo nos plantea. Si contamos con buena actitud, tendremos la mitad del trabajo hecho.