Una de las características de los madrileños es su especial gusto por vivir sus innumerables terrazas. A pié de calle o en cualquiera de sus azoteas con vistas, en Madrid son el lugar de reunión por excelencia, ya sea para desayunar, comer, cenar, tomar un café, una copa, bailar…
Los atardeceres de los claros cielos madrileños, cuando la tarde empieza a confundirse con la noche y comienzan en lo alto a variar los tonos del anarajando, al rosa, al rojo y al cárdeno, son siempre un espectáculo que se disfruta mucho más en una terraza con espectaculares vistas. Estas son algunas de las terrazas que ofrecen las mejores de Madrid.
Abierta solo durante la temporada de verano a partir de las 18.00, la terraza ubicada en la última planta del Hotel de Las Letras, en pleno corazón de la Gran Vía madrileña, es un lugar ideal para disfrutar de una copa al atardecer mientras te relajas con las sesiones de música chill-out que se organizan en este espacio innovador en el que se respira aires mediterráneos y cuyas vistas son realmente deslumbrantes vistas.
Abierta de miércoles a domingo y a muy pocos metros del Congreso de los Diputados, la Terraza del Hotel Urban, cinco estrellas GL, es otro de esos espacios al aire libre imprescindibles en Madrid. Tiene unas vistas únicas del centro de la capital y su oferta incluye una amplia carta de cocktails para todos los gustos y una selección de tapas.
Esta terraza es un verdadero jardín urbano con un privilegiado mirador de la ciudad. Llena de plantas, olivos y cipreses, La Terraza es el escenario ideal para disfrutar de las vistas a edificios emblemáticos y de la propuesta de coctelería del reconocido y premiado mixólogo Manel Vehí, con referencias tanto creativas como atrevidas. Además, se puede descansar en su solárium rodeado de vegetación con el único ruido del agua en su balsa desbordante.
Siempre hay un lugar por descubrir, una persona por conocer y un rincón para recordar. The Hat es el lugar donde terminar el día sintiéndose como en casa, un lugar con la libertad de un hostel y los servicios de un hotel. Con zona al aire libre y también acristalada. Situada en la calle imperial, en el barrio de Sol, distrito Centro de Madrid es una de las más castizas opciones para disfrutar de las terrazas de la capital.
Este privilegiado espacio, en pleno centro de Madrid, constituye el lugar ideal donde cenar de tapas y raciones, disfrutar de un magnífico brunch los fines de semana y donde deleitarse con una amplia oferta de cócteles y copas mientras se disfruta de las puestas de sol más exclusivas de Madrid . Son espectaculares sus vistas al Palacio Real y a sus Jardines y desde allí se pueden disfrutar también los mágicos atardeceres del Templo de Debod
El Oeste de Madrid se despliega ante la Terraza de Poniente para dejar al descubierto una vista panorámica de la ciudad con la sierra de Guadarrama como telón de fondo. La terraza es de temporada y permanece abierta desde mediados de junio hasta principios de octubre. Espacio exclusivo para clientes del hotel.
En la misma plaza de Santa Ana, en pleno barrio de Huertas, frente al histórico Teatro Español, hasta 1849 Teatro del Príncipe, delante de la estatua de Federico García Lorca y en lo más alto del Hotel Me Madrid Reina Victoria está Radio Rooftop Bar, un lugar en el que, de viernes a domingo, es un lounge, club, bar, restaurante donde relajarse y disfrutar de este oasis urbano de excepcionales vistas y música de vanguardia.
La azotea del Círculo de Bellas Artes cuenta con una de las mejores y más espectaculares vistas de Madrid, y ofrece a sus visitantes una perspectiva inigualable del paisaje urbano de la ciudad. Situada a 56 metros de altura sobre la Calle Alcalá, estuvo, durante un tiempo, cerrada parcialmente para su utilización como solárium. El edificio está coronado por la escultura Minerva, de Juan Luis Vassallo, emblema del Círculo desde su fundación. Desde ella es posible contemplar Madrid de manera panorámica, en 360 grados. Desde la Sierra de Guadarrama al norte, hasta el Cerro de los Ángeles al sur.
El Palacio de Cibeles es un edificio único. El icónico Ayuntamiento de Madrid cuenta además con uno de los atractivos más importantes de la capital: la terraza de Cibeles situada en su sexta planta. Las vistas que ofrece la azotea del palacio son un privilegio sobre el gran símbolo de Madrid, la Diosa Cibeles y su majestuosa fuente. Un cóctel, un aperitivo o simplemente un café se convierten en un momento inolvidable en este espacio único.
En la Gran Vía madrileña, La Terraza del Indigo se ha reinventado para seguir siendo un clásico del centro dela capital y abraza el MAD/MEX, donde lo mejor de Madrid se combina con lo mejor de México en una desenfadada fusión. Lo que se mantiene como seña de identidad son las maravillosas vistas y una puesta de Sol única. Sin lugar a dudas una de las mejores terrazas de Madrid donde disfrutar del paisaje urbano dándose un chapuzón en su Infinity Pool.
En la Plaza de Vázquez de Mella, frontera natural entre el barrio de Chueca y la Gran Vía está la Terraza del Room Mate Oscar que ya se ha convertido en uno de los lugares más emblemáticos de Madrid. Con vistas de 360 grados sobre la ciudad, es un remanso de paz en lo alto. El lugar favorito de residentes y turistas para disfrutar del atardecer. Diseñado por el famoso interiorista Tomás Alía, presenta una decoración con lounge, camas balinesas,
Con ascensor de acceso directo y en la planta 11 del Hotel NH Collection Madrid Suecia, es uno de los Roof Top más privilegiados de la capital. Dividido en dos alturas, su sky bar cuenta con una de las vistas 360 grados más espectaculares, tiene una cuidada decoración y una amplia carta de cócteles y combinados. Cuenta con DJ’s residentes y un sistema de cerramiento para los meses de invierno. Abre a diario desde las 12.30.
Bosco de Lobos es un jardín escondido en la terraza del Colegio de Arquitectos, en el corazón del barrio de Chueca. Se trata de un auténtico bosque en mitad del bullicio de la capital. Una experiencia imprescindible de la mano de Tomás Tarruella, empresario y creativo del mundo de la restauración.
El Viajero ya es un clásico madrileño. Abrió sus puertas en la Plaza de la Cebada en 1995 y rápidamente se convirtió en punto de encuentro obligado del Madrid más bohemio y vanguardista, contribuyendo a la reactivación de un barrio histórico y pintoresco en el que florecen bares, tascas y tabernas, y es uno de los recorridos de tapas y copas más emblemáticos de la capital. Situado en un palacete de tres plantas de finales del siglo XIX, ofrece distintos ambientes dependiendo del día y hora. En cuanto cae la noche El Viajero se convierte en uno de los sitios más especiales y carismáticos de la zona pudiendo disfrutar de las mejores vistas del barrio y de la Basílica de San Francisco el Grande.
En pleno Parque del Retiro, escondida entre las copas de los árboles, La Terraza se postula como un particular oasis. Ubicada sobre El Pabellón, junto a la icónica cúpula del rey Fernando VI, esta azotea se erige como uno de los rincones más mágicos y privilegiados de la ciudad. Preciosos atardeceres y el más sofisticado de los ambientes nocturnos, la mejor coctelería a cargo del barman de Florida Retiro: Oscar Molina , y un ambiente inspirado en los oasis del desierto de Marruecos.