En España todo el mundo sabe lo que es el calimocho, en euskera kalimotxo, una bebida que hemos exportado a Sudamérica y que en Argentina llaman rocanrol, cascarudo, dos tonos, cachetiao, vinola, karimocho, rifle o simplemente como vino con coca; en Brasil es conocido como vinhoca; en Chile, como jote, licor de ave, vino cola o tincola y en Uruguay como vino cortado.
Hay quien sostiene que el mezclar vino tinto con refrescos de cola, el popular calimocho, se viene practicando en nuestro país desde principios del siglo XX. También hay quien mantiene que el origen del calimocho hay que buscarlo en la segunda Guerra Mundial cuando los soldados norteamericanos destacados en Italia probaron la mezcla de su irrenunciable Coca Cola con el vino tinto de Chianti. Pero lo cierto es que su nombre, y en consecuencia su nacimiento oficial en España, es mucho más reciente.
De hecho, la primera fábrica de Coca Cola se instaló en nuestro país en 1953, 67 años después de que en 1886 un farmacéutico de Atlanta inventase el famoso refresco. Fue el 31 de marzo de 1953 cuando de la fábrica de Cobega en Barcelona salió la primera botella producida en España de esta cola que supone el 50% de la sencilla, popular y contundente receta del calimocho que, comenzó por entonces a conocerse también en nuestro país como cubata de pobre, cubata de obrero, Rioja libre, farola, albornoz, bicicleta o tincola.
Fiestas de San Nicolás
Fue el 12 de agosto de 1972, durante las fiestas de San Nicolás del Puerto Viejo de Algorta, en el vizcaíno Getxo, cuando una peña, "Antzarrak", compró para su "txosna", una caseta con bar, 2.000 litros de vino tinto que, se comprobó al probarlo, resultó estar picado y tener un sabor insufrible.
Una vez más, se hizo de la necesidad virtud y fue necesario enmascarar aquel vino mezclándolo con otros 2.000 litros de refresco de cola. Se cuenta que aquella bebida fue bautizada como "Kalimotxo" porque uno de los mozos que participaban en la fiesta tenía como apodo "Kalimero", porque no era precisamente demasiado guapo, pero todos le conocían como "el Kali", y feo en vasco se traduce como "motxo", con lo que uniendo las dos voces surgió la rotunda palabreja de "Kalimotxo", que rápidamente logró hacer fortuna y prosperar en aquel ambiente festivo y de fiesta en fiesta, de cuartel en cuartel y de botellón en botellón aquella mezcla asequible para cualquier bolsillo se exportó al resto de España con suma rapidez.
Pero esta no es la única versión del origen del kalimotxo. Es Agustín Martínez, de hecho uno de los miembros de la legendaria cuadrilla "Antzarrak", quien cuenta que el nombre surgió de dos amigos de la peña, el ya mencionado "Kalimero" y otro al que apodaban "Motxongo", y que de la fusión del comienzo de sus dos apodos surgió el "KaliMotxo" en aquella casa del siglo XVII de la barriada marinera de Getxo, conocida como "Etxetxu", en la que se reunían los cofrades y que hoy dos amigos, Nacho Ugarte e Iñaki de la Torre, han convertido en la Casa Museo del Kalimotxo.
En la RAE, con Coca o con Pepsi
Sea como fuere, hasta la Real Academia llegó a admitir en su diccionario la palabra "calimocho" definiéndola como "bebida que consiste en una mezcla de vino tinto y refresco de cola" y, a pesar de todo lo que se ha especulado sobre el registro comercial del calimocho, que se comercializa por algunas marcas con ese nombre, según los datos que figuran en la EUIPO, el equivalente europeo a nuestra Oficina Española de Patentes y Marcas, el "kalimotxo" fue registrado en aquella delegación el año 1996 por la compañía Financiera Comercial S.A, que 18 años después fue adquirida por Norinvest Iberia S.L., empresa del grupo Coca Cola Iberian Partners S.A. Y aunque en la EUIPO no está registrada la marca "calimocho", sí lo está desde el año 2015 el domino calimocho.com
Y la batalla continuó porque se da la circunstancia de que en el año 2016, Pepsi lanzó al mercado su propia bebida de calimocho con el nombre de 1893 y el 25 de abril de 2017 la compañía publicó en su cuenta oficial de Twitter, junto con un vídeo explicativo, lo siguiente: "We say it “cali-mocho” and we drink it with friends. Grab a little #1893PepsiCola and craft up one (or a few) tonight!", o lo que es lo mismo, "Se dice cali-mocho y lo bebemos con amigos. Coge un poco de 1893 Pepsi Cola y prepara uno (o varios) esta noche". Hay incluso grandes superficies como la alemana Lidl que lo han comercializado en envases de litro y medio.
Antonio Castillejo es abogado y periodista. Comenzó su carrera profesional en la Agencia Fax Press dirigida entonces por su fundador, Manu Leguineche, en la que se mantuvo hasta su desaparición en 2009. Especializado en información cultural y de viajes, desde entonces ha trabajado en numerosos medios de prensa, radio y televisión. Actualmente volcado con los mayores en 65Ymás desde su nacimiento.