María Martínez Denia
País Vasco
La Gilda, el curioso origen del primer pintxo de la historia
María Martínez Denia
Sábado 7 de octubre de 2023
ACTUALIZADO : Sábado 7 de octubre de 2023 a las 9:07 H
3 minutos
Desde finales de los años 40, el pintxo Gilda enamora a todo aquel que lo prueba
El pintxo no fue extendido por el País Vasco hasta la llegada de la Gilda a finales de los años 40, hasta ese momento únicamente se servían los vinos y los txakolis en las tabernas con aceitunas o antxoas del cantábrico.
Este pintxo pionero en la gastronomía vasca surgió de una manera muy natural. A finales de 1940, un cliente habitual de el Bar Casa Vallés en pleno centro de Donosti, cogió un palillo e introdujo tres de los aperitivos más frecuentes, con el objetivo de comerlos con una mayor facilidad. La Gilda está compuesta por una aceituna, una anchoa en salazón y una guindilla.
A los hermanos navarros Blas y Antxon Vallés les gustó tanto la ocurrencia que pronto la adoptaron en su carta y su pequeño bar se volvió reconocido en la ciudad. A este aperitivo le denominaron 'Gilda' en honor a la nueva película protagonizada por la actriz Rita Hayworth en 1946 que resulto todo un éxito mundial. Lo bautizaron de esta forma porque el pintxo reunía las mismas características que la actriz: "Salada, verde y un poco picante".
El sabor de la Gilda es fuerte, amargo y ácido. Elaborado con materias primas de calidad, la aceituna debe ser sin hueso y de manzanilla - aunque Casa Vallés lo mantiene con hueso para seguir la tradición-. En segundo lugar, la guindilla debe ser lisa, no muy grande ni picante y por supuesto un producto de acercamiento del País Vasco. Y por último, la anchoa siempre es en salazón, con poca barba y sin espinas, con un toque de vinagre. Para darle el toque final se adereza con un aceite no muy aromático que pueda ocultar el sabor de la anchoa pero sí dándole el aporte necesario.
A día de hoy, este pintxo se puede degustar en numerosos bares del territorio español y tiene hasta su propio día, 'Gilda Eguna' (el Día de la Gilda) celebrado el 15 de diciembre, y en el que los locales de Gipuzkoa lo recuerdan especialmente por ser el pionero. Por otro lado, Casa Vallés continua en pie tras más de 80 años abierto con su famoso pintxo Gilda por bandera, para el disfrute de todo aquel que se quiera acercar a su origen.