Cuando la fruta está temporada es el momento de disfrutarla de todas las maneras posibles, y también de aprovecharla para hacer algunas elaboraciones caseras, como compotas o mermeladas. De esta forma, nos aseguramos de contar con mermeladas de calidad, con los mejores ingredientes, y sin azúcares de más ni otros conservantes o ingredientes raros. Nos saldrá más económico y, por si todo esto fuera poco, es muy reconfortante hacer tus propias conservas. ¡Y el resultado es fabuloso!
En esta ocasión, vamos a preparar una deliciosa mermelada de melocotón, aprovechando los coletazos finales de esta fruta de verano, que ahora nos está regalando la huerta. Es muy fácil de hacer.
Ingredientes:
Melocotón, 1,5 kilos
Azúcar, 500 gr.
1 limón
1 manzana
Elaboración:
Para hacer esta mermelada de melocotón vamos a comenzar pelando los melocotones. Los partimos por la mitad para retirar el hueso y troceamos cada mitad en varios pedazos.
Es importante que el kilo y medio de melocotones lo pesemos ahora, con la fruta ya troceada, pelada y sin el hueso.
Acercamos al fuego una olla amplia con los melocotones y añadimos el azúcar. Mantenemos el fuego a media potencia hasta que el azúcar comience a disolverse.
Bajamos el fuego y cocinamos durante 10 minutos, removiendo de vez en cuando.
Pasado ese tiempo, añadimos el zumo del limón, con cuidado de que no caigan pepitas y añadimos también media manzana, partida en dos trozos. Como el melocotón no tiene demasiada pectina, por eso incorporamos la manzana (la futa con más pectina), para que añada pectina de forma natural. La pectina es un espesante presente de forma natural en muchas frutas. También se vende en polvo, y se podría añadir media cucharilla.
Seguimos cocinando durante media hora o 35 minutos removiendo de vez en cuando.
Cuando la fruta se vea muy deshecha, apartamos del fuego.
Retira la manzana, que ya habrá aportado su peptina y tritura bien el resto de la mermelada con la batidora.
Ya está lista nuestra mermelada de melocotón.
En conserva
Ahora, si lo deseas, puedes preparar una deliciosa conserva con esta mermelada.
Para ello, en primer lugar, deberás esterilizar los frascos. Lo ideal es hacerlo justo antes de preparar la mermelada. Es muy sencillo, tan solo tendrás que poner los frascos que vayas a usar en una olla amplia con agua y acercarlo al fuego. Los frascos y las tapas deben estar completamente sumergidos en el agua. Ponlos con el agua fresca y acerca a fuego, de tal forma que los frascos se vayan calentando al mismo tiempo que el agua. Si metes el frasco directamente en agua hirviendo, se podría romper por el choque térmico. Cuece durante 10 minutos.
Pasado ese tiempo, sácalos y deja que escurran sobre un paño limpio o sobre un papel de cocina.
Rellena los frascos con la mermelada recién hecha, tapa bien y vuelve a poner a cocer los frascos, otros diez minutos.
Pasado ese tiempo, sácalos, ponlos boca abajo sobre la encimera y deja que enfríen así completamente.
Sobre el autor:
Beatriz Torija
Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.