Las migas ruleras son un plato popular y muy sencillo de elaborar, de origen humilde… concretamente es una elaboración de origen pastoril. Se elaboran en La Mancha y en la Región de Murcia, aunque con diferencias. En La Mancha se hacen habitualmente con pan, mientras que en Murcia se elaboran con harina. Una harina que ‘se rula’ para formar migas, de ahí el nombre.
En el aceite donde se han frito los ajos y los "tropezones" se echa agua y harina, y a fuego lento, se van rulando, es decir, se le va dando vueltas con la rasera hasta que quedan hechas. El truco es hacer este paso a fuego lento, con paciencia.
Ingredientes:
Ajos tiernos, 50 gr.
4 o 5 dientes de ajo
1 ñora
Tocino, 50 gr.
Salchichas, 50 gr.
Longaniza, 50 gr.
Harina de fuerza, 200 gr.
Agua (misma cantidad que de harina)
Sal
Aceite de oliva
Elaboración:
En una sartén con buen fondo, ponemos un chorro de aceite de oliva y acercamos al fuego.
Vamos a ir friendo todos los ingredientes, de uno en uno, y por estricto orden para que cada uno vaya dejando su sabor.
Comenzamos por los ajos, enteros y sin pelar, pero un poco chascados. Los freímos hasta que estén bien tostaditos y los sacamos.
Después incorporamos los ajos tiernos, que se harán enseguida. Los sacamos a un plato aparte.
En el mismo aceite, freímos la ñora entera, y la sacamos. Hay que tener cuidado con este ingrediente, pues se quema con facilidad.
Incorporamos a la sartén el tocino, partido en taquitos y lo freímos bien. Cuando esté bien hecho, lo sacamos a un plato aparte.
Después, añadimos las salchichas, partidas en trozos del tamaño de un bocado, más o menos. Cuando estén hechas, las retiramos.
En último lugar, añadimos a la sartén la longaniza, en trozos similares a los anteriores. Freímos y cuando esté bien hecha, retiramos con la ayuda de una espumadera.
Es momento de preparar ya las migas en ese aceite, que ya tiene los sabores de todos los ingredientes.
Añadimos agua (es importante que la cantidad sea la misma que de harina, por volumen) a la sartén con el aceite. Cuando rompa a hervir, incorporamos de golpe la harina y comenzamos a mover. Ponemos a punto de sal.
Vamos moviendo sin parar, es lo que se denomina ‘darle al brazo y rasera’ hasta que se formen una especie de migas, bien rotas y sueltas. En ese momento volvemos a incorporar todos los ingredientes.
Cuando estén listas, se añaden todos los tropezones, tanto carnes como verduras.
Es muy habitual servir estas migas con una sardina en conserva o con un boquerón frito. Pero también hay quien prefiere acompañarlas de unos pimientos de padrón o de un huevo frito.
Sobre el autor:
Beatriz Torija
Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.