Las ensaladas no son, solo, para el verano. En invierno se pueden, y deber, seguir tomando. Sobre todo, si se trata de ensaladas con cuerpo y presencia, como ésta, con atún, legumbres y tomate seco en aceite, que no se toma fría sino a temperatura ambiente. Puede ser un excelente primer plato, o una guarnición de otro plato más contundente y calentito. ¿Te apuntas?
Ingredientes:
- Alubias blancas ya cocidas, 200 gr.
- Atún en conserva, 2 latitas
- Media cebolla morada
- Aceitunas cuquillo, un puñado
- Tomates secos en aceite, 5 unidades
- Brotes de espinacas, 150 gr.
- Sal
- Pimienta negra
- Aceite de oliva virgen extra
Elaboración:
Para hacer esta ensalada de habichuelas, lo primero que haremos es escurrir las alubias cocidas de su líquido de conservación y enjuagarlas bajo el chorro de agua fresca, en un colador amplio.
Deja escurrir bien y, después, coloca las alubias sobre una ensaladera amplia.
Abre las latitas de atún, escurre su aceite y añade el atún ligeramente desmigado a la ensalada.
Parte en dos o tres trozos los tomates secos, escurridos de su aceite y añádelos a la ensaladera.
Pela la cebolla y pártela en juliana fina. Incorpórala a la ensalada.
Selecciona las hojas de espinaca más pequeñitas, que serán las más tiernas. Si son de una bolsa, no necesitarás lavarlas, quizá quitarles algún rabo si son un poco largos, ya que en una ensalada quizá resulten un poco desagradables.
Por último, añade un puñado de aceitunas cuquillo, o aceitunas negras sin hueso si no encuentras las cuquillo.
Aliña con sal, un poco de pimienta negra molida y aceite de oliva virgen extra al gusto. Si te gusta, puedes añadir también un chorrito de vinagre de Jerez.