Región de Murcia
Las mujeres que ocupan un lugar destacado en la gastronomía murciana
Ellas son María Gómez, Estrella Carrillo, Cundi Sánchez y las hermanas Irene y Eva López
Las mujeres están ganando cada vez más protagonismo en todos los sectores de la sociedad. Uno de ellos es el mundo de la gastronomía, donde cada vez hay más mujeres al frente de establecimientos de primera calidad, y reconocidos con distinciones tan importantes como las Estrellas Michelín.
En la Región de Murcia hay cinco mujeres cocineras al frente de alguno de los establecimientos más conocidos de la Región. Ellas son María Gómez, Estrella Carrillo, Cundi Sánchez y las hermanas Irene y Eva López.
María Gómez, de Magoga, Cartagena
El restaurante de María tiene una Estrella Michelín, y en cada una de sus elaboraciones hace un guiño a la esencia de la Región de Murcia, sobre todo al Campo de Cartagena.
Gómez cree que ahora mismo las mujeres cocineras están ganando protagonismo, y ella es vivo ejemplo de ello. Aún así, queda mucho por hacer, como por ejemplo la conciliación familiar. Ella misma tuvo que reincorporarse al trabajo a los 20 días de dar a luz.
Estrella Carrillo, de Santa Ana, Los Ramos
Carrillo es la vicepresidenta de la Asociación de Cocineros de Murcia (Jecomur), y tiene a sus espaldas numerosos galardones por su implicación en proyectos de inclusión social.
Además, es la dueña de Santa Ana, un restaurante donde el 90% de su plantilla está formada por mujeres a pesar de que la propia Estrella asegura que "la hostelería es muy complicada en el tema de los horarios, por lo que el género femenino va a estar siempre muy descompensado”.
Cundi Sánchez, de El Albero, Ceutí
Cundi Sánchez quiere transformar los productos huertanos en creaciones sorprendentes con un toque asiático. Entre sus platos destacan el sushi y los makis variados,el futokami de atún con zanahoria, el uramaki de langostino, queso y aguacate o el maki picante tempurizado.
Irene y Eva López, del restaurante de Loreto, Jumilla
Irene y Eva son chef y jefa del restaurante de Loreto, un proyecto que cambió sus vidas tanto a nivel profesional como personal.
Irene es ingeniera y química, pero decidió dejarlo todo por la gastronomía.
Las hermanas son conscientes de que los horarios del sector es lo que provoca que muchas mujeres renuncien, pero ellas son optimistas.
