Con un inconfundible origen y reminiscencia árabe, esta receta de cordero es de lo más sabrosa y apetecible, con ese toque dulce irresistible. En esta ocasión, guisamos el cordero segureño, en lugar de prepararlo asado. Con una calidad excepcional, el guiso quedará tierno y jugoso, perfecto para un día de celebración.
Ingredientes:
800 g de pierna de cordero troceada
1 cebolla y media
2 dientes de ajo
20 ciruelas pasas
100 g de almendras peladas
1 cucharada de azúcar
agua
aceite de oliva virgen extra
aceite de oliva suave
sal
pimienta
perejil picado
1 rama de canela
1 cucharilla de canela en polvo
unas hebras de azafrán
Elaboración:
Pica una cebolla y los dos dientes de ajo y ponlos a pochar en una cazuela con un chorrito de aceite. Salpimienta el cordero y agrega. Rehoga (hasta que pierda el color de crudo). Añade una rama de canela y espolvorea con la canela en polvo y unas hebras de azafrán. Cubre con agua y sazona. Tapa y cocina el conjunto durante 30 minutos.
Pon a remojo las ciruelas pasas en un cazo con agua tibia y deja que se hidraten durante 20 minutos. Deshuesa e incorpora al guiso.
Corta la media cebolla sobrante en aros y añade a la cazuela. Espolvorea con el azúcar y cocina el conjunto durante 20 minutos más. Prueba el punto de sal.
Fríe las almendras en una sartén con un chorrito de aceite de oliva suave caliente. Escurre y sazona.
Sirve el guiso de cordero en una fuente amplia y agrega las almendras. Espolvorea con el sésamo tostado y adereza con perejil picado.
Sobre el autor:
Beatriz Torija
Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.