Helados, polos, refrescos, granziados, sobretes, zumos, aguas de sabores… este tórrido verano, es lo que más apetece. Hacer un granizado casero es mucho más rápido y sencillo de lo que parece. Tan solo tendrás que hacerlo con un poco de previsión para darle tiempo de congelador. Y al hacerlo casero, te aseguras de emplear fruta fresca de calidad y económica (¡no de dejes de usar limones con origen en Murcia, que son de una calidad excepcional!), así como ligeros y naturales, sin ningún tipo de aditivo, ni demasiada azúcar.
Ingredientes
6 limones
200 gr. de azúcar
Agua, 1 litro
Menta o hierbabuena, varias hojas, para adornar
Elaboración:
En primer lugar, ralla la cáscara de la mitad de los limones. Hazlo con cuidado, para tomar tan solo la parte amarilla, que es donde se concentra el aroma cítrico y los aceites esenciales del limón. Evita la parte blanca de la cáscara, que resulta amarga.
Exprime todos los limones y cuela el zumo, para evitar que caigan pepitas.
Mezcla el zumo de limón con la ralladura de la cáscara.
Añade también el azúcar. Acerca la mezcla al fuego y deja cocer durante unos minutos, para que reduzca a la mitad y se forme un almibar ligero.
Aparta del fuego y añade el agua. Mezcla todo bien.
Coloca en una tartera o táper y lleva al congelador.
Pasada una hora, saca tu táper del congelador y remueve bien con la ayuda de un tenedor. Vuelve a poner en el congelador.
Pasada otra hora, repite la operación, y una hora después, hazlo de nuevo. Es importante que saques la tartera y remuevas el contenido, rallando con un tenedor el hielo que se va foramndo, para darle forma y textura al granizado.
Sirve tu granizado en un bonito vaso o copa y adorna con unas hojitas de menta o hierbabuena.
Sobre el autor:
Beatriz Torija
Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.