Ni los helados, ni los refrescos, ni una caña de cerveza, ni el gazpacho… ni siquiera un bañito en la piscina o playa. En verano, no hay mejor manera para refrescarse que una limonada fresquita y natural, recién hecha. Bromas aparte, la limonada es una de las mejores bebidas para sobrellevar el calor cuando se hace sofocante, en verano. Calma la sed y resulta muy refrescante, está llena de vitaminas, es hidratante y, sobre todo, está deliciosa. Es una receta muy sencilla de hacer y saludable, perfecta para tenerla siempre en la nevera.
Ingredientes:
6 limones
Un litro y medio de agua
200 gr. de azúcar
Unas hojitas de menta o hierbabuena, para adornar (opcional)
Elaboración:
Para hacer esta limonada casera, lo primero que vamos a hacer es lavar bien los limones.
Partimos los limones en ocho trozos cada uno y los ponemos en el vaso de la batidora o en el robot de cocina, junto con todo el zumo que hayan soltado al cortarlos.
Añadimos también el agua y la mitad del azúcar y trituramos hasta obtener una crema o puré homogéneo, sin trozos visibles de limón.
Colamos esta mezcla, con el chino o con un colador de trama fina. Al final, estrujamos bien la pulpa que quede en el chino, para sacar todo el jugo que podamos.
Añadimos al zumo de limón el resto del azúcar que teníamos reservado, una pizquita de sal para realzar el sabor y removemos bien para disolver.
Guardamos en la nevera para que la limonada esté bien fresquita.
En el momento de servir, añadimos unos hielos y adornamos con una rodaja de limón y con unas hojitas de menta o hierbabuena.
Sobre el autor:
Beatriz Torija
Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.