La redacción de 65YMÁS elige a las 65 personas mayores de 65 años más influyentes de España en 2024. Un total de 65 sénior, verdaderosinfluencers que no se limitan a un éxito pasajero en redes sociales, sino cuyo ámbito de influencia ha traspasado y sigue traspasando fronteras físicas y generacionales. Y es que para alcanzar el éxito hace falta tiempo, perseverancia y continuo crecimiento, valores todos ellos que vienen de la mano de la experiencia con la que cuentan de sobra los representantes de nuestra lista de mayores de 65 años más influyentes.
Si en 'Juego de Tronos' Madre de Dragones era uno de los personajes más emblemáticos, en el mundo de la gastronomía, podríamos decir que Montserrat Fontané es la verdadera madre de dragones. Sus hijos están entre los mejores del mundo, pero es ella la que les ha enseñado todo lo que saben. Conseguir mesa en el restaurante de sus hijos cuesta meses de lista de espera, pero ella sigue dando el menú del día al mismo precio, y da de comer a todo el equipo del triestrellado Celler de Can Roca. Ha estado más de 50 años al frente de su restaurante, Can Roca, junto a su marido. Pese a una rodilla que no le permite estar de pie mucho tiempo, sigue preparando los calamares para toda familia en Navidad.
Cocina de siempre
Montserrat Fontané (1936) es una mujer sencilla, humilde y muy muy trabajadora. Nació en Can Batista de Sant Martí de Llémena, entre la Garrotxa y el Gironés. En plena posguerra, nacida en el seno de una familia trabajadora, se vio obligada a dejar los estudios muy pronto. Con 13 años ya trabajaba como camarera para ayudar a su familia. Allí, en Can Lloret, y junto a su hermana mayor, es donde aprendió a cocinar.
Montó junto a su marido una casa de comidas, Can Roca de Germans Sábat, un barrio de Girona que limita con la población de Taialà. Un restaurante sencillo que desde que abrió en 1967 no ha dejado de dar menús del día a la gente del lugar. Sin embargo, la importancia de Montserrat como cocinera y de este restaurante es mucho más profunda… probablemente, sin ella, no existiría el mejor restaurante del mundo, El Celler de Can Roca y sus tres hijos, Joan, Josep y Jordi ni tendrían tres estrellas Michelin ni, quizá, se hubieran dedicado a la gastronomía.
Montserrat es amante de la cocina de siempre, de los ingredientes naturales, de la cocción lenta, la reducción. Borda como nadie platos como los calamares a la romana (que sigue prepararando cada navidad para toda la familia), los canelones o la escudella y carne de olla.
Can Roca
Montserrat y su marido, que era conductor de autobús, decidieron invertir sus ahorros en comprar un pequeño local, una barbería, y convertirlo en casa de comidas. Así, en 1967 abría en Taialà el restaurante Can Roca con Montserrat en la cocina y Josep sirviendo los platos. El matrimonio tuvo la visión de abrir un local viendo que era parada del autobús y que seguro tendrían clientela. No pudieron tener mayor acierto. Desde su apertura, ni un solo día ha habido una mesa vacía. Aunque no es tanto por la ubicación, como por la prodigiosa mano de Montserrat en la cocina.
Hacía cocina tradicional, platos sencillos pero deliciosos: callos, calamares, guisos… y su plato estrella: la sopa de hierbabuena. Can Roca es el origen de toda una saga, que ahora ya está en su tercera generación, con los nietos mayores (los hijos de Joan y Josep), dedicados también a la cocina.
El restaurante Can Roca es uno de esas casas de comida de toda la vida, siempre llenas, doblando turno cada día. Con los padres de tres de los mejores chefs del mundo al frente: los hermanos Roca, Joan, Josep y Jordi. Sin embargo, Montserrat nunca ha querido cambiar su restaurante, que sigue sirviendo menú del día. El restaurante de los padres de los hermanos Roca es, además, el que da de comer cada día a todo el personal del universo Roca.
Sus hijos, los mejores del mundo
“Siento una felicidad inmensa”, dijo Montserrat Fontané cuando el restaurante de sus hijos, El Celler de Can Roca fue declarado por primera vez como el mejor restaurante del mundo, y lo celebró con su marido tomando pan con jamón y bebiendo cava. Aunque cuentan que la primera frase que dijo cuando le dieron la noticia de que habían declarado al Celler como el mejor restaurante del planeta fue: “¿Y eso quien lo ha dicho?”.
De los éxitos de sus hijos ella tiene mucho que ver, así lo dicen siempre tanto Joan, como Josep y Jordi. Sin embargo, ella, se quita mérito. "He sido su maestra para enseñarles cómo trabajar, pero los platos que hacen ahora, los han hecho ellos solitos. Quizá al principio alguno se parecía a los míos, pero ahora ya no".
Montserrat fue quien dio a Joan Roca su primera chaquetilla, que aún conserva, y quien le permitió hacer su primer guiso en el restaurante: un arroz a la cazuela. Sin duda, ella sembró el gusanillo. Lo cierto es que, desde muy pequeños, los tres hermanos echaban una mano en el restaurante de sus padres, a la salida del colegio y los fines de semana.
Después de más de 50 años al frente de los fogones del restaurante, después de varias caídas por una rodilla delicada, se ha retirado. Pero ha estado cocinando cada día hasta los 85 años. Añora cocinar cada día en su restaurante, gobernar las ollas de las que salen maravillosos guisos, hablar con los clientes cada día.
Premios y reconocimientos
La trayectoria de Montserrat Fontané ha sido reconocida por diversas distinciones, como ser nombrada hija predilecta de Sant Martí de Llémena junto a su marido Josep Roca Pont. En 2014 también recibió el Premio Nacional de Cocina Lola Torres que otorga la fundación benéfica y cultural Amics de Galícia, para apostar por la máxima calidad en las materias primas y recetas de siempre.
Sobre el autor:
Beatriz Torija
Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.