Rosa Roch
Rosa Roch es redactora especializada en temas de salud, alimentación y gastronomía.
… saber más sobre el autorLas vitaminas son compuestos necesarios para el buen funcionamiento del organismo. Su exceso o su falta puede significar una disfunción de los diferentes órganos del cuerpo, pudiendo ocasionar problemas de relevante importancia.
La vitamina E, conocida también como tocoferol, es una vitamina liposoluble que tiene un papel importante en el organismo, pues debido a su acción antioxidante, interviene en la formación y mantenimiento de varias estructuras del cuerpo como son los músculos, las retinas, el sistema nervioso o el sistema cardiovascular, retrasando el envejecimiento.
Su acción en el cuerpo es neutralizar los radicales libres, lo que protege de la oxidación la membrana de todas las células del cuerpo y en especial las del sistema cardiovascular, nervioso y muscular.
Además, evita la oxidación de proteínas, grasas y ácidos nucleicos y evita la formación de nitrosaminas, unos compuestos químicos perjudiciales para la salud.
Entre otras funciones que tiene la vitamina E, podemos destacar su intervención en la formación de glóbulos rojos y la coagulación de la sangre. Estimula el sistema inmunitario y ayuda al buen funcionamiento de la retina y en la fertilidad.
Su defecto en el cuerpo puede verse alterado por diferentes enfermedades. Es una vitamina que no la produce el organismo, sino que se obtiene a través de los alimentos ricos en grasas y queda almacenada en el hígado y el tejido adiposo. Cualquier enfermedad que altera la absorción de este nutriente, como puede ser la enfermedad de Crohn o la enfermedad celíaca, puede llevar a un déficit de esta vitamina que, si bien, no produciría una enfermedad de manera directa sí haría que ciertos órganos y partes del cuerpo se vieran afectados, por ejemplo por:
La ingesta de vitamina E a través de los alimentos no es perjudicial, los problemas pueden surgir por un abuso de suplementos vitamínicos, lo que podría producir:
Visto todo ello y sabiendo de la importancia de mantener unos buenos niveles de vitamina E en el cuerpo, llevar una dieta sana y equilibrada será la mejor manera de conseguirlo. Para ello, incorporar a la dieta alimentos ricos en esta vitamina hará que nos beneficiemos de todas sus propiedades, manteniendo en plena forma la musculatura y los sistemas cardiovascular, inmunológico y nervioso: