Alimentos de temporada en primavera: la ventaja de comer como nuestros ancestros

Nuestros antepasados sabían que la escarola anunciaba la llegada del invierno y que en verano los zumos debía ser de melón o sandía, pero nunca de naranja. Pero, hoy en día, con la globalización podemos comer cualquier alimento en todas las épocas del año. Sin embargo, los alimentos de temporada tienen beneficios nutricionales, económicos y medioambientales que desconocemos.

Estarás más nutrido

En primer lugar, son alimentos mucho más sanos porque han crecido de forma natural, en los árboles o en el suelo, sin el uso de productos químicos que entorpezcan su maduración. Gracias a esto, su textura, sabor y apariencia son mejores porque han nacido con la luz del sol. Además, las propiedad nutricionales se mantienen intactas y el aporte de minerales, vitaminas y nutrientes es mucho mayor.

Son mejores para tu bolsillo y el medioambiente

A la hora de comprarlos notarás que son más económicos gracias a que han crecido de forma natural. Los alimentos que crecen en invernaderos o vienen de otros países pueden llegar a costar hasta cinco veces más. Por otro lado, estarás apoyando a la agricultura tradicional y local.

Por lo hablar del ahorro en emisiones de CO2, debido a que han sido cultivados sin pesticidas ni aditivos. De hecho, para elevar el contenido nutricional y, favorecer un crecimiento sano y fuerte, los alimentos de temporada suelen llevar fertilizantes naturales como estiércol, humus de lombriz o fertilización con granos de café.

 

Frutas de primavera

La primavera es la época del año en la que el metabolismo se acelera más rápidamente. En este sentido la naturaleza, que siempre ha destacado por su sabiduría, nos ofrece en las frutas, verduras y hortalizas que contribuyan a esa limpieza y desintoxicación del organismo.

De esta manera, es hora de decir adiós a los cítricos de invierno tales como las mandarinas, limones, pomelos o naranjas y saludar a las frutas más coloridas como las fresas; que destacan por ser ricas en vitamina C y antioxidantes. También es temporada de nísperos; fuente de potasio, y de los albaricoques y nectarinas, más propias de mayo y junio.

Entre las frutas de temporada también están las cerezas y los arándanos, aunque los últimos llegarán cuando la primavera esté llegando a su fin. Eso sí, son frutas que hay que degustar lo antes posibles porque se pudren de forma muy rápida. 

 

Verduras de primavera

Si te fijas en el súper a medida que avanza la primavera verduras como brócolis, coles, remolachas, coliflores, alcachofas, acelgas, puerros y espinacas empiezan a desaparecer. O, de haberlas, serán más caras por estar fuera de temporada.

Ahora es tiempo de lechuga, rábanos, espárragos silvestres, judías tiernas, zanahorias o cebollas. Cuando los rayos del sol empiezan a ser más fuertes y aumentan la horas de luz se dejan ver las berenjenas, los calabacines, los tomates, las patatas o los pimientos. 

 

Carnes de primavera 

Al igual que ocurre con las frutas, verduras, pescados o mariscos, hay determinados animales que siempre tendrán mejor sabor, color y textura en primavera. Algunos de ellos son el cordero pascual, el pavo o la codorniz; una pieza de cada que a finales de invierno está en su mejor época.

 

Para saber qué alimentos se encuentran en su temporada puedes visitar la la web de la Fundación Dieta Mediterránea.