Comida asiática: descubre los tipos de fideos que se utilizan

Existe una amplia gama de fideos en la cocina asiática. Son la base de innumerables platos desde hace siglos, tanto por sus propiedades nutritivas como por la variedad de colores, tamaños e ingredientes con los que están elaborados, como arroz, té verde, almidón de judía, calabacín o quinoa, aunque también podemos encontrar fideos con nombres tan exóticos como soba, shirataki, udon, ramen, somen o tokoroten, entre otros. Hoy te hablamos de cinco de ellos.

1.- Fideos de arroz

El arroz es un cereal considerado como alimento básico en la gastronomía de muchas culturas, en especial la asiática y en algunas de latinoamericanas. Es el segundo cereal más producido en el mundo, solo por delante del trigo, y el más importante de la alimentación del ser humano.

Los fideos de arroz en la cocina asiática suelen ser la alternativa más conocida. Son fuente de vitamina B, fósforo y potasio, y ayudan a equilibrar la tensión arterial.

Para cocinarlos bastará con hervirlos durante unos 14 minutos. Se suelen acompañar con tomate natural, salsa de yogur y unos frutos secos, como nueces picadas.

2.- Fideos de judías mungo

La judía mungo es una leguminosa originaria de las regiones cálidas, cultivada por primera vez en la India hace más de 5.000 años. También se la conoce como soja verde, aunque con la soja solo tiene en común su alto contenido en proteínas.

Los fideos están elaborados con almidón de judías mungo y también reciben el nombre de fideos de celofán por el aspecto que adquieren una vez cocidos, se vuelven transparentes.

Necesitan un tiempo de cocción aproximado de 10 a 15 minutos y combinan muy bien con un salteado de setas con frutos del bosque que darán un notable contraste de sabor.

3.- Fideos de konjac

El konjac es un tubérculo de origen asiático muy consumido en Japón, China y Corea. Su raíz es 100% fibra con una gran capacidad de absorción de agua. Debido a ello, la fibra de konjac es muy utilizada en productos de dietética para las dietas de adelgazamiento y para la producción de pasta.

Si bien su presencia en la gastronomía occidental es muy reciente, debido a sus propiedades saciante, reguladora de los niveles de azúcar en sangre y protectora de la flora intestinal, cada vez es más frecuente encontrarlos en los supermercados.

Para cocer estos fideos, 13 minutos en agua hirviendo serán suficientes y tomados en una sopa miso te permitirán disfrutar tanto de su sabor como beneficiarte de sus propiedades.

4.- Fideos de quinoa

La quinoa o quinua es rica en hidratos de carbono complejos, contiene alrededor de 16 gramos de proteínas por cada 100 gramos y grasas insaturadas, es rico en nutrientes, un llamado pseudocereal considerado uno de los alimentos más más sanos que existen, catalogado desde 1996 por la FAO (@FAO) como uno de los cultivos con gran futuro para la humanidad por sus beneficios para la salud, sus usos y por considerarse un alimento capaz de paliar los problemas de desnutrición. En definitiva, la quinoa está considerada un superalimento.

Para elaborar los fideos se suele utilizar harina de maíz, patata y quinoa. El tiempo de cocción varía considerablemente, de 6 a 16 minutos y es ideal para ensaladas verdes aliñadas con una vinagreta de limón y aceite.

5.- Fideos de calabacín

El calabacín es una cucurbitácea, como la calabaza, con propiedades nutritivas propias. Está compuesto principalmente por agua, hidratos de carbono y en menor cantidad grasas, proteínas y fibra. Es un alimento bajo en calorías ideal para las personas que han de seguir una dieta para controlar el peso.

Se ha puesto muy de moda utilizar el calabacín en crudo o salteado solo durante un par de minutos, cortado a modo de fideos (existen aparatos que facilitan el corte, los Spirelli), una opción muy sana y recurrida en las dietas veganas.