Victoria Herrero
Alimentación
Esto es lo que tienes que cenar si quieres adelgazar
Victoria Herrero
Foto: Bigstock
Jueves 2 de enero de 2020
ACTUALIZADO : Jueves 2 de enero de 2020 a las 7:52 H
3 minutos
En el plato de nuestra última comida del día no pueden faltar las proteínas, verduras y fruta
Vaya por delante que no se trata de un truco de magia. No solo con estas cenas ligeras eliminaremos esos kilogramos de más. Para bajar peso lo mejor es acudir a un profesional sanitario que, además de poner especial atención en lo que comemos cada día, nos aconsejará que sigamos una serie de buenos hábitos entre los que no puede faltar algo de ejercicio semanalmente. Un consejo que se torna especialmente significativo cuando se trata de una persona mayor.
Pero vayamos a los que nos ocupa. En el momento de la cena no pueden faltar las proteínas si queremos adelgazar como defienden nutricionistas como los de la Clínica Opción Médica (@opcionmedica). De esta manera, la comida de final del día tiene que llevar un 25%-30% de proteínas; además de verdura (la mitad de lo que ingieras esa noche) y una proporción de un 20%, aproximadamente, de carbohidratos. Todo ello acompañado de unos buenos vasos de agua.
Así, como ejemplo de menú saludable para cenar puedes optar por el hummus, una crema de verduras, una pechuga de pollo con quinoa, una rodaja de salmón con patatas cocidas, una tortilla de finas hierbas con queso fresco o unos mejillones al vapor, entre otras muchas recetas de lo más sanas.
La cena no perfecta
Si ya sabes cómo es una cena saludable para terminar el día no tienes que seguir cometiendo estos errores nutricionales que no solo afectarán a tu peso, sino a tu salud en general:
- Cenar viendo la televisión, el ordenador o sin apartar la mirada del móvil hace que estés distraído a la hora de comer e ingieras más de lo que deberías.
- Comer a toda prisa y lo primero que encuentres en la nevera. Destierra esta idea: cenar un yogur o una pieza de fruta solamente no es saludable ni recomendable nutricionalmente.
- Acompañar tu cena, o tu comida del mediodía, con una bebida alcohólica o un refresco azucarado.
- Tirar de productos precocinados y fritos para ganar tiempo y sucumbir a la pereza de no hacer la cena.
- Cenar justo antes de meternos en la cama con lo que la digestión no se podrá hacer de forma adecuada.
- Pasarnos con las cantidades y hacer de la cena la comida principal del día cuando no lo debe ser.
- Tener el salero en la mesa para aderezar nuestras comidas con demasiada alegría.