Lola Santos
Lola Santos es redactora especializada en temas de alimentación, viajes y ocio.
… saber más sobre el autorMuchas veces nos preguntamos qué diferencia hay entre el cava y el champán. Y lo cierto es que comparten varias características, como el método de elaboración. Podríamos decir que son medio hermanos. Vamos a ver qué diferencia estos dos vinos espumosos.
Tanto el cava como el champán son vinos blancos que contienen gas carbónico natural, es decir, que se ha producido por una segunda fermentación. El primer período de fermentación para crear los espumosos se hace igual que todos los vinos, y el segundo período es mediante el método champenoise.
Este método consiste en una segunda fermentación ya en la botella, donde se añaden levaduras y azúcar. Durante el tiempo de reposo, la botella se tapa con un corcho especial y se coloca de tal manera que los sedimentos caen al cuello de la botella. Pasado el tiempo, el cuello se congela, se quita la tapa y los sedimentos congelados. La botella se vuelve a tapar, esta vez con el conocido tapón de corcho en forma de hongo.
Hasta aquí lo que comparten. Pero, ¿qué los diferencia? En primer lugar, el lugar de origen. La principal de las diferencias entre el Champagne y el cava es que el champán francés proviene de una zona muy concreta, Champaña, al nordeste de Francia y está protegido por una denominación de origen, es decir, que solamente a los que provienen de esta región pueden denominarse champán. Sin embargo, el término champán se usa para este tipo de vinos espumosos, procedan de donde procedan.
Por lo que respecta la cava, este no procede de una sola región, sino de todo el territorio español. En 1986 se estableció la necesidad de la Denominación Cava para los espumosos de calidad y conseguidos mediante el método tradicional, así se formó la Región del Cava constituida actualmente por 159 municipios repartidos por España: Cataluña, La Rioja, Aragón, Valencia y Extremadura.
La segunda diferencia está en el tipo de uva con que se realizan ambos vinos. El champán y el cava consiguen sabores diferentes porque se crean con tres uvas muy arraigadas al terreno. Las variedades principales en el champán francés son la Pinot Noir, Pinot Meunier y Chardonnay. Las principales uvas del cava español son las variedades de la Parellada, Xarel·lo y Macabeo, la primera tinta y las otras dos blancas.
Otra diferencia la da el terreno y el clima. Las uvas son la materia prima de los vinos espumosos y, por tanto, dependiendo de cómo se cultive y en qué circunstancias, la fruta acogerá unas propiedades u otras. El cava se cultiva en un país mediterráneo y por lo tanto las cualidades climatológicas no se parecen a las de la región del norte de Francia.