Lola Santos
Lola Santos es redactora especializada en temas de alimentación, viajes y ocio.
… saber más sobre el autorLa respuesta a la pregunta sobre si conoces los tipos de tomates es fácil: no. Porque hay miles de variedades de tomates a lo largo de todo el mundo, por lo que conocerlos todos resulta imposible. Pero sí una decena de tipos de tomate que consumimos habitualmente. Vamos a repasarlos y ver para qué elaboraciones son mejores uno u otro.
El tomate es la hortaliza más consumida en los hogares españoles. Por ejemplo, el pasado año se consumieron 605 millones de kilos, según los datos publicados por la Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas, Hortalizas, Flores y Plantas vivas (FEPEX).
Aunque no todas se cultivan ni llegan al mercado, existen unas 10.000 variedades de tomates muchas de ellas debido al cruce de variedades. Entre otras cosas porque eso ha permitido adaptar esta hortaliza de verano a otras épocas del año.
Se pueden preparar de muchas formas: en ensalada, como acompañamiento, en cremas frías, rellenos, en conserva, como base para salsas o guisos… Vamos a recoger algunas de las variedades más populares y consumidas.
Tomate de pera, como indica el nombre, tiene forma de pera, con una piel lisa, dura y de un color rojo brillante. Es uno de los tomates preferidos para hacer tomate frito y conservas y el ideal para elaborar salsas, salmorejo y sopas.
El tomate cherry es pequeño, rojo y del tamaño de una cereza. Por su textura y sabor dulce, resulta muy rico en ensaladas. Su reducido tamaño en comparación con otras variedades y su crecimiento determinado permite cultivarlo fácilmente en una maceta; sus pequeños frutos resultan además muy decorativos.
El tomate raf es una variedad muy versátil: se puede consumir fresco o en conserva. Tiene una textura crujiente y un sabor entre dulce y agrio. De forma irregular y poco uniforme, está considerado un tomate gourmet. Recibe el nombre de las siglas “Resistente Al Fusarium”.
El tomate de colgar (o ramallet) es un fruto de tamaño medio-pequeño, de color rojo anaranjado y se presenta en racimos para que se puedan colgar. Tiene una gran cantidad de pulpa y con menor cantidad de agua y es ideal para untar en el pan. También suele usarse en guisos.
El tomate rosa de Barbastro es de los tomates con sabor más dulce y sus piezas también pueden ser muy grandes. Está considerado uno de los más buenos, es de color rosáceo y de piel muy fina, posee una pulpa suave y compacta. Es muy aromático. Es ideal para cualquier tipo de ensalada, aunque también puede degustarse solo, con un poco de aceite, sal y pimienta.
El tomate corazón de buey tiene forma de corazón, es de gran tamaño y con pocas semillas. Es uno de los más apreciados también por su gusto dulce, apto para consumir de una forma sencilla: con un poco de sal y aceite de buena calidad. Se trata de un tomate muy sabroso y jugoso, bastante resistente.
Otro tomate muy apreciado por su sabor es el feo de Tudela, un tomate con la piel bastante dura, bastante carnoso y con pocas pepitas. Es de color rojo intenso, con un sabor dulce y un toque más ácido que otras variedades.
El tomate kumato es un híbrido conseguido a partir del cruce de tomates y considerado una variedad gourmet, tiene un sabor dulce y una gran jugosidad que lo hacen especial para ensaladas. De color muy oscuro, casi negro, es rico en licopenos, sustancias naturales presentes en mayor concentración en la piel, con propiedades antioxidantes.