Errores en tu dieta que hacen subir el colesterol

Comes sano y te cuidas, pero cuando vas al médico y te hace una analítica, el colesterol ha subido o sigue superando los 200 mg. Algo falla. Y, aunque el médico te recomiende pasar por la farmacia para controlar los niveles de colesterol, la dieta es fundamental para lograrlo.

Muchas veces pensamos que estamos comiendo de forma saludable, pero cometemos algunos errores en la elección de ciertos alimentos y en la forma de prepararlos que nos llevan a no poder reducir los niveles de colesterol. Vamos a repasar algunos de esos errores.

Los lácteos, mejor desnatados

A la hora de consumir productos lácteos, mucho mejor optar por las opciones desnatadas, porque son grasas saturadas que influyen en el colesterol. Leche y yogur, siempre desnatados y mejor evitar la nata, la crema de leche y los quesos grasos. Si, por ejemplo, a una crema de verduras le añadimos mantequilla o crema de leche, ya no será tan saludable. En este caso, podemos optar por añadir caldo de verduras o leche desnatada, por ejemplo.

Muchas veces ponemos atención a los ingredientes principales y nos olvidamos del acompañamiento o de la forma de cocinarlo. Respecto a esto último, lo ideal es optar por cocinados de que no nos hagan añadir grasa: a la plancha, al horno o al vapor.

Los gratinados y las salsas que acompañan nuestra comida a veces contienen demasiadas grasas saturadas. Mejor optar por hierbas aromáticas.

Lo mismo sucede con las ensaladas. Los vegetales y hortalizas son la sabe de las ensaladas, son sanas y apenas tienen calorías. Pero si le añadimos un queso graso, por ejemplo, habremos añadido grasas saturadas que no nos ayudan a controlar el colesterol.

Cuidado con los desayunos

Uno de los errores que cometemos a la hora de cuidar nuestro colesterol es optar por desayunos con muchas grasas saturadas. Para evitarlo, mejor si la leche de nuestro desayuno es desnatada. Si tomamos tostadas, debemos optar por el pan integral porque la fibra que contiene nos ayuda a reducir la absorción del colesterol. En la tostada, en lugar de añadir mantequilla, podemos echar aceite de oliva. Y, si tomamos zumos, que sean caseros.

Debemos moderar el consumo de carbohidratos refinados, porque el exceso de estos puede hacer aumentar los triglicéridos. Mejor tomarlos integrales, porque hemos visto que la fibra nos puede ayudar.

Y con cenar solo fruta

A priori, parece una opción muy sana si optamos por cenar solo fruta. Pero hay que tener cuidado. La fruta es rica en fructosa, un azúcar de rápida absorción. Y un exceso de este azúcar se puede traducir en un aumento del colesterol y los triglicéridos. Si tomamos azúcar en la cena, nuestro cuerpo gasta menos energía y el exceso se almacena en forma de grasa. Lo que contribuye a elevar el colesterol en sangre.