Mariola Báez
Alimentación
¿Qué es una dieta texturizada y cómo puede ayudar a las personas mayores?
Tratar los alimentos para que resulten apetecibles y fáciles de tragar es el objetivo de esta dieta
La dificultad a la hora de ingerir los alimentos es una patología que se denomina disfagia y que resulta bastante habitual en personas mayores. Esta enfermedad, que puede ser un síntoma o una manifestación de otras, entre ellas las enfermedades de Alzheimer o Parkinson, está definida por La Sociedad Española de Medicina interna como una dificultad o anomalía que impide el paso normal de los alimentos líquidos o sólidos de la boca al estómago.
Las consecuencias pueden resultar graves, porque la dificultad a la hora de deglutir los alimentos puede llevar a la desnutrición y además, provocar importantes problemas a nivel psicológico en la persona que lo padece.
Las ventajas de aplicar a la dieta técnicas de texturización de los alimentos
Lograr platos ricos, saludables y apetecibles es el objetivo de una dieta texturizada, apta para aquellas personas con dificultades a la hora de tragar con normalidad. Es un plan alimenticio que siguen numerosas residencias geriátricas y centros de día para personas mayores, conscientes del problema.
La texturización es algo más que un triturado (puré) tradicional. Es un conjunto de técnicas que respetan la consistencia de cada alimento, conservando todos sus nutrientes y aquellas propiedades, como el aroma o el color, que hacen que resulte atractivo. Simplemente se trata de modificarlo lo justo para conseguir que resulte más fácil de masticar y deglutir.
Para una persona a la que le cueste masticar y tragar, una dieta de este tipo puede ser una buena solución a problemas como la falta de interés por la comida, el temor a no poder ingerir los alimentos con normalidad o las digestiones pesadas por la falta de una adecuada masticación.
El elemento social de la comida
Tal y como señala el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar social, la alimentación, además de proporcionar los nutrientes necesarios para la vida y la buena salud, tiene también un importante aspecto social que se basa en lo gratificante que resulta compartir buenos momentos a la mesa en compañía de familiares y amigos. Si existen problemas a la hora de poder tragar con normalidad los alimentos, esos beneficios que proporciona el simple hecho de comer en compañía, pueden perderse.
Según explican nutricionistas de Sanitas Mayores, una dieta texturiza presenta numerosas ventajas para aquellas personas con problemas a la hora de ingerir correctamente los alimentos. La texturización permite elaborar platos más fáciles de tragar pero gastronómicamente apetecibles porque esa nueva textura que se intenta conseguir respeta en lo posible la que tenía el alimento antes de ser tratado. El objetivo es que la persona no aprecie un cambio radical con respecto a su dieta anterior y que pueda perfectamente comer lo mismo, aunque ligeramente modificado, que el resto de comensales con los que comparte mesa.