Victoria Herrero
Alimentación
¿Tu pareja no aguanta tus ronquidos? Prueba con estos alimentos que pueden ayudarte
La miel, la leche de soja o los pescados grasos resultan aconsejables en este sentido
Cuando se produce una obstrucción del paso de aire desde la parte posterior de la boca y la nariz es cuando aparecen los molestos ronquidos que pueden hacer que una persona no duerma en toda la noche si su pareja sufre de este problema. Una afección de salud que, como recuerdan los profesionales del Servicio de Otorrinolaringología del Hospital Clínico de Valencia (@GVAclinic), se ve agravado con la edad y suele ser más habitual en el caso de los hombres y especialmente si estos son obesos o tienen sobrepeso.
Para evitarlo, las soluciones pasan por iniciar el tratamiento oportuno cuando obedezca a una alergia de tipo nasal o a una infección, llevar a cabo una extirpación de las amígdalas, una intervención quirúrgica de rinoplastia o bien otra operación para reducir el tamaño del paladar y la garganta. Otra idea que explican los expertos es que la persona que ronca se coloque una especie de mascarilla que envía aire ambiental a presión a la nariz y la boca. Así, por medio de un tubo lo que se consigue es que se abran completamente las vías respiratorias.
Tratamientos médicos y terapéuticos que pueden venir acompañados de otras herramientas de ayuda naturales y que se encuentran en la despensa de casa. Y es que algunos alimentos han demostrado su eficacia a la hora de aminorar los incómodos ronquidos para el descanso de la pareja. Son estos que se indican a continuación.
Alimentos beneficiosos
Esta es otra de las situaciones en las que se ha demostrado que una buena nutrición puede ser clave para mejorar ciertos aspectos de salud o prevenir algunas patologías y dolencias. Así pues, en el caso de los ronquidos, en un menú adecuado en este sentido no puede faltar la miel ya que los expertos aseguran que sus propiedades ayudan a abrir las vías respiratorias. De lo contrario y si se taponan se complicarían los ruidos tan molestos a la hora de dormir.
Un poder, el de mejorar el sistema respiratorio, que también se observa en el caso de la cebolla o el ajo: dos ingredientes esenciales para cualquier receta que se vaya a elaborar. Incluso en el primer caso se puede tomar en forma de una relajante infusión.
No obstante, si uno prefiere una taza de un clásico té de menta tampoco vendría mal ya que esta bebida favorece dicha circunstancia de salud debido a que es un descongestivo que acaba con la mucosidad de las fosas nasales. Además, con una infusión de menta (a la que se le añaden unas gotas de aceite de oliva) se pueden hacer gárgaras para reducir una posible inflamación de la garganta.
También ayuda a respirar mejor y limpiar la garganta tomarse un vaso de leche de soja antes de irse a la cama o bien, comer un puñado de almendras. De esta manera y gracias a estos frutos secos se refuerzan los tejidos de esta parte del cuerpo cuando se producen las vibraciones sonoras.
Por último, resulta muy saludable (no solo en esta circunstancia) el aceite de oliva especialmente en lo concerniente a su acción antiinflamatoria. El condimento ideal para una receta de pescado al horno que también ayudará en este tipo de circunstancias; especialmente si se eligen los más grasos como es el caso del salmón, el atún, las sardinas o un plato de caballa. Al contrario, nada de decantarse por la mantequilla o la margarina ya que son grasas saturadas que aumentan el reflujo y pueden contribuir a que el ronquido se mantenga como hasta ahora.
Otros consejos prácticos que ayudan en el caso de que una persona ronque
Así pues, además de una cena ligera con algunos de estos nutrientes beneficiosos (y de hacer esta comida varias horas antes de irse a la cama), los expertos mencionados hablan también de toda una serie de hábitos que se deben cambiar si se quiere roncar menos. Por ejemplo, evitar una vida sedentaria y apostar por hacer algo de ejercicio físico de forma regular.
Una actitud (y una acción) de lo más sana donde no entran ni el tabaco ni el alcohol. En el primer caso, el cigarro contribuye a que se inflamen las vías aéreas superiores, mientras que el abuso de bebidas alcohólicas actúa a modo de relajante muscular de las mismas zonas. Es lo que se conoce como hipotonía; esto es, se favorece una pérdida del tono muscular con lo que la faringe vibra mucho más al contacto con el aire.
De la misma manera, no resulta aconsejable la toma de tranquilizantes antes de acostarse. En el caso de necesitarlos se debe consultar antes con el médico. Por último, a modo práctico una persona que ronque puede seguir otra serie de sencillos consejos:
- Colocar la cabecera de la cama o al menos la almohada algo más levantada e inclinada para respirar mejor.
- Favorecer que la pareja se duerma o se acueste antes para ayudarle en su descanso nocturno.
- Hacer ejercicios con la lengua o bien guturales, como recuerdan desde el hospital Royal Devon and Exeter (@RDEhospitals), ya que puede ser muy beneficioso en este caso.
- Habituarse a no dormir boca arriba ya que es cuando más se ronca. ¿Cómo? Poniendo en práctica un sencillo truco: coser a la parte de la espalda del pijama una bolsa donde se metan granos de arroz, garbanzos o una pequeña pelota de goma. Al darse la vuelta, la persona que ronca estará incómoda y volverá a colocarse de lado.