¿Qué beneficios aporta la patata a la dieta de los mayores?

Las patatas constituyen una de las opciones más socorridas en sus distintas versiones de cocinado para incorporar a los platos como guarnición o como acompañamiento de gran cantidad de preparados. Generalmente gustan a todo el mundo y usarlas de esta manera es muy socorrido. No obstante, no tienen muy buena fama, sobre todo, las fritas, pero ¿es merecida? Veamos qué dice la ciencia.

Más calidad a la dieta

Un estudio realizado por la Universidad Estatal de Pensilvania (Estados Unidos), publicado en el British Journal of Nutrition, ha confirmado que añadir este tubérculo a la dieta de forma diaria mejora su calidad, en comparación con los granos refinados como el arroz, la pasta o el pan blanco.

El análisis se llevó a cabo dividiendo a los participantes en dos grupos: uno tuvo que comer patatas al vapor al horno todos los días durante cuatro semanas y el otro, guarnición de granos refinados. Tras un descanso de dos semanas, se intercambiaron las guarniciones en los dos grupos y así se mantuvieron otras cuatro semanas. A parte de esta condición no se pusieron más restricciones dietéticas.

Se realizaron mediciones de varios marcadores de riesgo metabólico, como la glucosa en plasma, la insulina sérica, el colesterol además de otros lípidos en sangre, la presión arterial y la calidad de la dieta de cada participante.

Los granos refinados y las patatas no afectaron a los factores de riesgo cardiometabólico. Sin embargo, la ingesta de potasio y fibra de los participantes, el consumo total de almidones y vegetales y el índice saludable, que determina lo bien que se sigue una pauta dietética, resultaron más elevados cuando ingirieron las patatas en lugar de los refinados. Según los investigadores este análisis se ha realizado sobre un grupo de personas sanas, por lo que el siguiente paso sería efectuar estudios específicos en personas que tienen mayor riesgo de desarrollar enfermedad cardiometabólica.

Presión arterial

Otro estudio realizado por científicos de la Universidad de Scranton (Estados Unidos), determinó que la patata preparada solo en el microondas, sin añadirle ningún condimento y en especial mayonesa o kétchup, que son los preferidos por los norteamericanos, posee distintos beneficios para la salud. En concreto, el análisis se realizó sobre 18 pacientes con sobrepeso y presión arterial alta, que comieron entre seis y ocho de estos tubérculos, dos veces al día, a lo largo de un mes.

El resultado fue que tras esta dieta, vieron reducida su presión arterial diastólica (la presión mínima hay entre un latido y otro) en un 4,3%, y la sistólica (la presión máxima del corazón cuando late) en un 3,5%, además ninguno incrementó su peso.

En esta investigación se matiza que cuando las patas se fríen, al someterlas a temperaturas tan elevadas suelen perder gran parte de sus propiedades saludables. Además, la mayoría de las propiedades del tubérculo están en la piel, por lo que conviene cocinarlo con ella. El doctor Joe Vinson, director del estudio, explicó que tras el análisis de los resultados obtenidos se comprobó que la mejor manera de preservar las propiedades de la patata es cocerla en el microondas.

Cualidades nutricionales

Lo cierto es que esta hortaliza siempre ha gozado de muy mala fama, pero resulta que es un alimento con importantes cualidades nutricionales que los mayores también pueden incorporar en su alimentación. Está presente durante todo el año y se cultiva en regiones templadas de todo el mundo.

Desde un punto de vista nutricional, destaca su alto contenido en hidratos de carbono, sobre todo en forma de almidón, y una pequeña parte como glucosa, fructosa y sacarosa. Precisamente su alto contenido en almidón es lo que explica su mayor aporte calórico (88 kilocalorías por cada 100 gramos de patatas), matizan desde la Federación Española de Nutrición (FEN @FENnutricion).

Posee cantidades destacables de vitamina Cm aunque dependiendo de cómo la cocinemos puede perder parte de la misma. Por ello, siempre se recomienda prepararlas al vapor o al horno, envueltas en papel de aluminio. La cantidad de esta vitamina en una patata cruda de tamaño medio equivale al 46% de verduras y hortalizas recomendadas para hombres y mujeres de 20 a 39 años con una actividad física moderada. Mientras que otros aportes como los de la vitamina B6, cubren el 21% de las ingestas recomendadas para este grupo de población, indican desde la FEN.

La patata contiene minerales como el potasio, lo que contribuye al funcionamiento normal del sistema nervioso y de los músculos. Otros minerales que incorpora de manera destacable son fósforo, magnesio y calcio.

Posee a su vez carotenoides, entre los que destacan violaxantina, anteraxantina y luteína. En cantidades menores tiene neoxantina, beta-criptoxantina, zeaxantina y b-carotenos.

La mejor manera de consumir patatas y poder beneficiarse de sus propiedades nutricionales es por tanto, cocinándolas en el horno, al vapor o en el microondas. Los otros sistemas de cocción eliminan gran parte de sus cualidades por las altas temperaturas que requieren.