Mariola Báez
Alimentación
Los distintos tipos de dietas vegetarianas: ¿qué alimentos incluye y excluye cada una?
Ya no basta identificarse como vegetariano, hay que especificar para evitar confusiones
Son muchas las personas que por decisión personal eliminan de su dieta determinados alimentos. En general, cualquier dieta vegetariana o vegana, como indica su nombre, se basa en la ingesta de productos vegetales y no de alimentos o productos derivados de origen animal.
Es importante recordar, tal como hace la Asociación Vegana Española (AVE) que elegir este tipo de dietas forma parte de una filosofía de vida basada en el respeto al medio natural y en concreto a los animales en su conjunto. Un vegano/a no solo sigue unas normas específicas en cuanto a su alimentación, sino que reprueba cualquier tipo de explotación animal, también a la hora de cubrir otras necesidades como pueden ser la ropa o el calzado. Pieles, lana, seda, cosméticos… un producto que lleve cualquier ingrediente que proceda de los animales, no tiene cabida en la manera de pensar y de sentir de una persona vegana.
Entre una dieta vegetariana flexible y una vegana estricta, existen distintas posibilidades nutricionales. Hay muchos matices, pero entre las dietas de este tipo más conocidas y seguidas se encuentran:
- Lacto vegetariana. Excluye la ingesta de carnes de todo tipo (pescados incluidos) pero admite el consumo de leche, vegetal y animal, y sus derivados junto a todo tipo de frutas, verduras, hortalizas y cereales
- Lacto ovo vegetariana. Dentro de las dietas “verdes” es una de las más flexibles, ya que, además de la leche, también admite la ingesta de huevos.
- Vegetariana parcial. En este caso, el consumo esporádico de pescado o de carne de pollo es posible.
- Vegana estricta. Cualquier tipo de carne procedente de animales marinos o terrestres queda excluido. Los veganos, en principio, tampoco toman huevos, leche, miel o cualquier otro alimento que proceda, directa o indirectamente, de un animal.
¿Las dietas vegetarianas y veganas son saludables?
En este punto, aunque hay distintas opiniones, los expertos coinciden en que las dietas vegetarianas, como cualquier otra, deben aportar los nutrientes necesarios para el correcto funcionamiento del organismo. El principal inconveniente de este tipo de alimentación radica en la falta de la proteína animal, de alto valor biológico, y en la posible carencia de determinadas vitaminas y minerales, que, como señala la Unión Vegetariana Española (UVE), deberán ser obtenidos de otros alimentos que puedan contenerlos, como las leches vegetales, el tofu o el seitán, la llamada “carne vegetal”.
Aunque depende de las necesidades nutricionales que cada persona pueda requerir en un momento dado, las dietas vegetarianas y veganas pueden resultar saludables, siempre que se sigan los adecuados controles que eviten posibles carencias nutricionales.