Ignacio Casanueva
Ignacio Casanueva es redactor especializado en temas de tecnología y salud.
… saber más sobre el autorUn fuerte dolor a la altura del riñón o de las vías urinarias puede hacer que no podamos movernos y postrarnos a la espera de que éste termine.
Aunque hay muchas causas de ello, una de las más comunes es un cólico nefrítico. Se trata de una molestia muy aguda en la zona de los riñones debido a una obstrucción aguda provocado por una piedra o cálculo renal. Estos cálculos obstruyen los conductos por los que viaja la orina, provocando una retención y un aumento de la presión que es la que causa el dolor.
No solamente las piedras pueden causar ese “atasco” es las vías urinarias, sino que puede haber otros elementos como es el caso de los tumores, o enfermedades benignas como la fibrosis retroperitoneal.
El principal síntoma es el dolor en la zona, pero este puede ir acompañado de náuseas, vómitos y sudores. Además, también podemos encontrar este problema con fiebre; hematuria (o presencia de sangre en la orina); disuria o la dificultad a la hora de orinar; y aumento de las veces que se va al baño.
Dependiendo de los síntomas podremos saber qué tipo de cólicos nefríticos padecemos: si son renales el dolor se localizará en la zona del abdomen y las costillas flotantes; mientras que si son uretrales el dolor es en la zona de los genitales.
Los cálculos son formaciones de todos aquellos restos que no se han eliminado por la orina. Para evitarlos debemos:
Dieta: Es fundamental para el tratamiento de las piedras del riñón. Por ejemplo una dieta que contenga muchas proteínas incrementarán el riesgo de que crezcan las piedras.
Beber mucho líquido: sobre todo agua, para incrementar la producción de orina. Pero también podemos consumir infusiones, zumos y caldos. Sabremos si estamos bebiendo mucho o poco prestando atención al color de la orina. Si es amarillo claro, tendremos unos niveles de hidratación correctos, si en cambio es amarillo oscuro o naranja, es señal de que debemos beber más.
Hacer ejercicio: Gracias al esfuerzo físico sudamos y eliminamos todos los minerales que no necesitamos, además de que de esta forma los huesos retienen mejor el calcio en vez de acumularlo en los riñones.
Reducir la sal: Se trata de uno de los principales minerales que provoca los cálculos. La Organización Mundial de la Salud OMS ha detallado que los españoles tomaos casi 10 gramos de sal al día, cuando debería ser la mitad.
Los cólicos nefríticos son un problema Benigno, pero cuyos síntomas son muy molestos y pueden impedirnos hacer una vida normal. Prestar atención a lo que comemos, y sobre todo bebemos, nos ayudará a evitarlos.