Ignacio Casanueva
Ignacio Casanueva es redactor especializado en temas de tecnología y salud.
… saber más sobre el autorDolor en el abdomen, estreñimiento y diarrea, malestar al comer o tomar alimentos… Estos son algunos d ellos síntomas que sufren las personas con colon irritable. Su denominación exacta es Síndrome del Intestino Irritable (SII).
Esta patología se caracteriza por el dolor en el abdomen que se repite cada poco tiempo, junto a periodos alternos de síntomas; además de asociarse con alteraciones en el ritmo intestinal, así como sentimiento de hinchazón o distensión. Una enfermedad de la cual no se conoce el motivo por el cual los pacientes sufren estos síntomas de forma crónica. Desde la comunidad científica el punto de vista más aceptado y demostrado es que existen alteraciones de la sensibilidad digestiva que pueden estar influenciadas por factores psicológicos. No hay más que fijarse en la importancia que ha ido adquiriendo la flora intestinal.
A su vez existen otras patologías que podrían influir en esta enfermedad como gastroenteritis, intolerancias alimentarias, alteraciones hormonales, factores genéticos hereditarios, así como factores externos como estrés laboral o económico.
Hemos mencionado los síntomas más comunes, pero conocer en detalle nos ayudará a identificar esta enfermedad.
- Dolor abdominal: Suele ser difuso o localizado en la parte baja del abdomen. El paciente sentirá un dolor opresivo o punzante de baja o moderada intensidad. La duración de este síntoma suele durar un par de horas que suele aliviarse yendo al baño. El inicio o la presencia del dolor abdominal se asocia habitualmente con deseos de defecar o con cambios en la frecuencia o consistencia de las deposiciones y frecuentemente, el paciente relaciona su comienzo con la ingesta de algún alimento.
- Alteraciones del ritmo intestinal: Este síntoma puede manifestarse como el predominio de estreñimiento o diarrea, de forma alterna. Es frecuente notar la saciedad precoz al comer, así como las náuseas, los vómitos y el ardor.
- Otros síntomas: Podemos incluir en este grupo las evacuaciones incompletas y por tanto las visitas repetidas al baño, así como la presencia de moco en las deposiciones.
Estos síntomas ayudan al diagnóstico de la enfermedad, el cual lo realizará un profesional sanitario. Éste se basará en el estudio de la historia clínica, así como en una exploración física. Para completar el diagnóstico el médico podrá diseminar sus sospechas realizando algunas pruebas complementarias como un análisis general, así como de sangre, orina y heces, estudios radiológicos de abdomen con y sin contraste, ecografía abdominal y sigmoidoscopia o colonoscopia.
No existe una medida única para solucionar esta patología, sino que el paciente debe evitar los alimentos y bebidas que empeoran los síntomas (como el café y el alcohol), comenzar a realizar ejercicio físico y/o tomar fibra si se padece estreñimiento. La dieta mediterránea será una opción para obtener los beneficios de una buena alimentación.