El coronavirus, definido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una “pandemia”, tiene una tasa de mortalidad más alta entre los pacientes de mayor edad, especialmente, entre quienes tienen otros problemas de salud o enfermedades crónicas. Por ello, HelpAge International España quiere recordar e insistir en la importancia de ofrecer información, fondos y medidas dirigidas de forma específica a las personas mayores. Además, en este contexto de emergencia sanitaria, la discriminación por razón de edad se convierte en un factor de riesgo muy grave.
HelpAge está trabajando para ofrecer consejos y orientación sobre el coronavirus dirigida a personas mayores y a quienes cuidan de ellas, así como información y documentación actualizada sobre cómo afecta esta situación a la vida de las personas mayores y cómo podemos eliminar las barreras adicionales a las que se enfrentan. Por ello, han publicado dos guías: 'Covid-19: Orientaciones y consejos para personas mayores' y 'Pautas para el cuidado de personas mayores en residencias para el contexto del coronavirus (covid-19), aplicables al ámbito familiar', que pueden descargarse desde la página web de HelpAge International España.
Ante una emergencia sanitaria como esta, una de las prioridades es informar a la ciudadanía sobre las medidas de prevención y dar a conocer los recursos disponibles. En este sentido, las instituciones públicas deben ofrecer información dirigida a las personas mayores y también encontrar el modo adecuado para llegar a ellas, especialmente a aquellas que vivan solas, vivan en zonas rurales o aisladas y tengan bajos niveles de alfabetización o escaso acceso a medios de comunicación. Además, no podemos olvidarnos de las personas mayores que vivan en situaciones especialmente complejas, como aquellas con pocos recursos y sin una vivienda digna, personas migrantes en situación irregular o mujeres mayores que sufran violencia de género, entre otras.
Esta crisis está demostrando que es esencial contar con sistemas de salud sólidos, que permitan que todas las personas tengan acceso a tratamientos médicos en igualdad de condiciones. La falta de recursos sanitarios, los problemas de movilidad, la dificultad para trasladarse y poder llegar a los centros de salud o el desconocimiento sobre cómo acceder a información actualizada pueden generar situaciones de discriminación por razón de edad.
Por ello, los sistemas de salud deben fortalecerse para ser capaces de responder a la complejidad de la salud durante la vejez, así como ante el impacto de brotes de enfermedades como el coronavirus en las personas mayores.
Además, hay que señalar que las personas mayores que viven en residencias son particularmente vulnerables al covid-19. Sin embargo, existen una serie de medidas que se pueden adoptar o seguir para reducir el riesgo y garantizar su bienestar. Todo el personal implicado en los cuidados debe estar preparado, equipado e informado para poder protegerse y proteger a las personas a las que cuidan. Para ello, es importante difundir información
sobre qué acciones de prevención tomar, cómo debe ser la interacción con el exterior y qué hacer si una persona está contagiada.
Por otro lado, el distanciamiento social es una medida esencial para acabar con esta pandemia, pero muchas personas mayores no están en condiciones de vivir en aislamiento o cuarentena porque necesitan cuidados o apoyo diario. Además, los grupos de riesgo ante el brote de coronavirus deben permanecer en sus casas y pedir ayuda para realizar tareas tan esenciales como hacer la compra o ir a la farmacia. Por ello, todas las actuaciones que se pongan en marcha para abordar esta pandemia deben identificar y considerar todas estas necesidades y que no supongan un riesgo aún mayor para ellas.
