La ciudad de Wuhan, en China, fue el primer lugar en reportar casos de COVID-19 en el mundo y, entre diciembre de 2019 y mayo de 2020, causó casi dos tercios de todos los casos de la infección en el país. Ahora, los investigadores informan en la revista PLOS Neglected Tropical Diseases que han examinado a más de 60.000 personas sanas en China para detectar anticuerpos contra el SARS-CoV-2 y concluyen que miles de residentes de Wuhan estaban infectados con casos asintomáticos de COVID-19 después de que se creía que la infección estaba bajo control.
Las pruebas rápidas de anticuerpos se utilizan para diagnosticar infecciones presentes y pasadas con el virus SARS-CoV-2. Los anticuerpos IgG positivos sugieren una infección previa, mientras que los anticuerpos IgM indican una infección actual o reciente. La detección de ambos tipos de anticuerpos puede proporcionar una mejor comprensión del número de infecciones asintomáticas en una población a lo largo del tiempo.
En Wuhan, el número de casos de COVID-19 alcanzó su punto máximo en febrero de 2020 y la ciudad se declaró inicialmente libre de la enfermedad a fines de abril, aunque aparecieron pequeños grupos de casos en meses posteriores.
En el nuevo trabajo, Xue-jie Yu, de la Universidad de Wuhan, y sus colegas estudiaron la prevalencia de anticuerpos IgG e IgM en muestras de sangre recolectadas entre el 6 de marzo y el 3 de mayo de 2020, de 63.107 personas en China. Todas las personas evaluadas estaban sanas y se sometieron a exámenes de detección antes de regresar al trabajo.
De acuerdo con una gran cantidad de casos ocurridos en Wuhan, el porcentaje de personas con anticuerpos positivos contra el SARS-CoV-2, aproximadamente el 1,68%, fue significativamente más alto que en otras regiones de China, donde la positividad de anticuerpos promedió el 0,38%.
Además, según la tasa de IgM positiva del 0,46% en Wuhan, los investigadores estimaron que miles de personas en Wuhan se infectaron asintomáticamente entre marzo y mayo de 2020, cuando no se informaron casos clínicos de COVID-19.
"Concluimos que existió una gran cantidad de portadores asintomáticos de SARS-CoV-2 después de la eliminación de los casos clínicos de COVID-19 en la ciudad de Wuhan –advierten los investigadores–. Las cepas no virulentas de SARS-CoV-2 aún pueden causar síntomas en individuos extremadamente susceptibles y también pueden revertir a una cepa altamente virulenta para reavivar la epidemia de COVID-19 en China".
