Verónica Mollejo
Salud
Cuidados paliativos en enfermedades no oncológicas: principales ventajas
Verónica Mollejo
Foto: Bigstockphoto
Domingo 22 de septiembre de 2019
ACTUALIZADO : Jueves 23 de julio de 2020 a las 13:37 H
4 minutos
Este tipo de tratamiento normalmente suele estar vinculado al cáncer o los tipos de demencia
Los cuidados paliativos “constituyen un planteamiento que mejora la calidad de vida de los pacientes y sus allegados cuando afrontan problemas inherentes a una enfermedad potencialmente mortal. Previenen y alivian el sufrimiento a través de la identificación temprana, la evaluación y el tratamiento correctos del dolor y otros problemas, sean estos de orden físico, psicosocial o espiritual”, explican desde la Organización Mundial de la Salud (@WHO).
Hasta hace algunos años, este procedimiento estaba dedicado exclusivamente a los pacientes oncológicos pero, debido a los beneficios que les aportaba, la comunidad científica decidió extender sus servicios a enfermedades crónicas avanzadas y progresivas con un pronóstico de vida limitado. Esta lista incluye dolencias de suma importancia como la esclerosis múltiple, el Parkinson, la demencia, las anomalías congénitas, el sida, la tuberculosis o enfermedades cardiovasculares y respiratorias, entre otras muchas.
En este sentido, “la práctica de los cuidados paliativos requiere de un equipo multiprofesional e interdisciplinar con una formación específica para garantizar un adecuado apoyo al enfermo y sus familiares. Los profesionales que forman estos equipos son médicos, enfermeras, psicólogos, auxiliares de enfermería y trabajadores sociales y deben dedicarse exclusivamente al cuidado de personas con enfermedad crónica, avanzada y terminal”, añade la Asociación Española Contra el Cáncer (@aecc_es).
Ventajas de los cuidados paliativos
El acceso a los cuidados paliativos tiene lugar a través de dos vías: por indicación de los especialistas del hospital de referencia o por los profesionales de Atención Primaria. Una vez solicitado, dicho procedimiento puede realizarse tanto en el hospital como en el domicilio del paciente. Eso sí, sea cual sea la opción escogida por los médicos y los familiares, los cuidados paliativos proporcionan al enfermo las mismas ventajas, padezca o no una dolencia oncológica.
- El suministro de medicamentos para controlar el dolor, las náuseas y el resto de síntomas que acompañan a la enfermedad. La fisioterapia y la terapia ocupacional también pueden aliviar las molestias que el paciente pueda sufrir.
- Orientación nutricional si presenta falta de apetito o no puede seguir una alimentación normal.
- Grupos de apoyo, asesoramiento y remisiones a profesionales en salud mental para tratar problemas emocionales y de afrontamiento.
- Ayudar a los pacientes y sus familiares en cuestiones espirituales para explorar sus creencias y así aceptar la situación y obtener mayor tranquilidad.
- Asistencia a la hora de tomar decisiones médicas.
- Apoyo para comprender el diagnóstico, las fases de la enfermedad, las terapias disponibles, los formularios médicos e incluso los asuntos legales.
- Coordinación entre todos los médicos que han participado en el tratamiento.
- Facilitar el contacto con recursos de transporte y alojamiento.