Teresa Rey
Cuídate
El láser lipolítico se utiliza para combatir la grasa más rebelde del cuerpo
Se trata de una técnica estética que reduce los depósitos de grasa y mejora la apariencia de la piel
La grasa localizada es una de las más difíciles de eliminar. Se acumula en la tripa, las caderas, los muslos o la papada principalmente, y en ocasiones a pesar de mantener una alimentación equilibrada y hacer ejercicio, no logramos acabar con ella. Desde la medicina estética nos ofrecen algunas alternativas y una de ellas es el láser lipolítico. Una alternativa que se puede combinar con otros tratamientos, que se aplica a cualquier edad, tanto a hombres como a mujeres, y que en general ayuda a mejorar el estado de la piel por lo que también se emplea para mejorar la celulitis.
El método
Este procedimiento se basa en la utilización de un láser específico que reduce los depósitos de grasa. Para ello, explican desde la Asociación de Medicina Estética de Madrid, se realiza una pequeña incisión con el objetivo de introducir una cánula que incorpora una fibra óptica en su punta y que es la que conduce la energía del láser.
El láser lipolítico trabaja a una longitud de onda determinada, de modo que al alcanzar el acúmulo de grasa libera una enzima que se encuentra en el tejido graso, la lisozima. El calor del láser transforma esa grasa dura en ácidos grasos que después se van a eliminar, explica la doctora especializada Mª Ángeles López Marín, directora del Centro Médico Rusiñol.
Entre las ventajas de este tratamiento, además de la citada, destaca que mejora la apariencia de la piel pues estimula la producción de colágeno, lo que hace que esta luzca más suave y joven. Además, es un tratamiento mínimamente invasivo, con el que no se siente apenas dolor, aunque después de su aplicación se puede presentar enrojecimiento en la zona.
Valoración previa
Antes de someterse al láser lipolítico para abordar la grasa localizada es necesario hacer una valoración previa de cada paciente. Existen algunas contraindicaciones como llevar prótesis metálica o marcapaso, puntualiza López Marín.
Este es un método que funciona bien en abdomen, glúteos, parte interna de los muslos, brazos y papada. No obstante, se puede combinar con otras técnicas como electroestimulación o gimnasia pasiva y también se debe complementar con la práctica de algunos ejercicios que nos indicará le médico estético. De igual modo, para que sea efectivo es necesario mantener una dieta equilibrada y hacer actividad física con regularidad.