Carlos Zapatero
Cuídate
Siento los músculos de las piernas agarrotados, ¿qué puedo hacer?
Carlos Zapatero
Lunes 2 de diciembre de 2019
ACTUALIZADO : Lunes 2 de diciembre de 2019 a las 6:55 H
3 minutos
Descarga la musculatura de tus piernas y afronta tu actividad diaria con estos consejos
Un espasmo muscular es lo que coloquialmente se conoce como un agarrotamiento de nuestros músculos. Pese a que no desprende ningún tipo de gravedad, la sensación puede llegar a ser muy desagradable. Es importante saber cómo deshacerse de estos espasmos, pues su continuidad en el tiempo puede traducirse en problemas más graves, como una contractura.
Rodillo para masajes, una solución eficaz
Especialmente cuando se trata de los cuádriceps o de los gemelos, una de las mejores soluciones que puedes encontrar para aliviar los espasmos musculares son los rodillos para masajes.
Existen rodillos que se utilizan precisamente para favorecer la flexibilidad del músculo. A través de un sencillo masaje, conseguiremos relajar la tensión de la musculatura y reducirla al mínimo, favoreciendo así la descarga del mismo.
Reposo activo
Uno de los errores más comunes cuando sentimos un dolor en los músculos de nuestras piernas es guardar reposo en casa. Sin embargo, por la naturaleza de la dolencia, una de las mejores formas de recuperar el estado original del músculo es mediante un descanso activo. Salir a dar una vuelta, dar un paseo de media hora o acudir andando a cualquier actividad pueden ser algunas de las mejores soluciones para recuperar la salud de nuestra musculatura.
Estira la zona afectada
Los estiramientos son imprescindibles en la rutina de cualquier persona que realice ejercicio de manera regular. Gracias a ellos no solamente vamos a lograr maximizar la flexibilidad de los músculos, sino que lograremos liberar toda la tensión acumulada.
Es importante adquirir el hábito de seguir una rutina de estiramientos adecuada, antes y después de la actividad física, aunque esta sea menor. Pese a que muchas personas apenas dan importancia a esta parte del entrenamiento, es tanto o más importante que la actividad en sí, pues de ellos va a depender la asimilación que nuestro entrenamiento va a tener en el organismo.
Aplica hielo
Tal y como afirman desde Sanitas, aplicar hielo envuelto sobre un objeto, como un paño, va a favorecer la circulación de la sangre. Eso sí, no debes de hacer un uso excesivo del hielo. Una aplicación cada cuatro horas, durante no más de 20 minutos, será más que suficiente para conseguir los efectos deseados. Es importante saber que, pese a que mucha gente lo desconoce, el hielo puede provocar el efecto contrario al que buscamos, retrasando la recuperación.