Teresa Rey
Cuídate
¿Son efectivos los cepillos eléctricos de limpieza facial en personas mayores?
Están contraindicados en ciertos tipos de pieles y algunos análisis indican que no son tan eficaces
Dentro de los productos de cosmética femenina el cepillo de limpieza facial es un aparato que se oferta en líneas generales como una alternativa a este proceso de rutina de cuidados. La forma de venderlo depende de cada marca, pero lo más habitual es que se ofrezca como una manera de conseguir una limpieza cutánea más profunda. Sin embargo, tiene sus pros y contras, y en el caso de las mujeres mayores hay que tomar algunas precauciones, ya que no están indicados para todas las pieles.
Solo para limpiar
Estos dispositivos están orientados a la limpieza exclusivamente. La tecnología que emplean no es exactamente igual en todos, aunque sí se basan en un movimiento vibratorio. Poseen un cabezal con unas cerdas que se tiene que aplicar sobre el rostro y dependiendo del método que empleen, o bien este cabezal gira sobre sí mismo o simplemente vibra, sin girar. No penetra en los tejidos cutáneos, sino que arrastra la suciedad que hay en la superficie del cutis.
Se pueden usar con geles y jabones específicos para el proceso de limpieza, y no es recomendable aplicarlo con otros productos ni siquiera exfoliantes. Se trata de utilizarlo entre 60 y 90 segundos, como mucho, y el efecto que dice crear es el de una piel más brillante y luminosa.
Hay que tener en cuenta algunas contraindicaciones. Algunos dermatólogos aconsejan no usar estos dispositivos si nuestra piel es sensible, con rosácea o arañas vasculares, está seca o es muy reactiva. No es recomendable si se tiene acné o heridas en el rostro.
La piel tiene que estar en buenas condiciones, no ha de tener imperfecciones y hay que moderarse en su uso para que la piel no se vuelva sensible a su aplicación.
¿Son eficaces?
Respecto a la eficacia de estos aparatos, un estudio realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) determinó que no aportan ningún valor añadido respecto a los sistemas de limpieza facial manuales o tradicionales. Desde su punto de vista y conclusiones “resultan bastante caros” en relación con los beneficios que anuncian.
Para probarlos recurrieron a 20 mujeres de entre 18 y 50 años con la piel sucia, bajo la supervisión de un dermatólogo. Tras usar los cepillos de limpieza facial no encontraron que la piel se mostrara ni más brillante ni más luminosa.