Noelia Hontoria
Cuídate
Tipos de arrugas, ¡no todas son por la edad!
La genética, la exposición al sol o la expresividad son algunas de las causas de las arrugas
El tipo de piel de cada persona influye mucho a la hora de tener arrugas y de que estén más o menos marcadas. De hecho, existen diferentes tipos de arrugas y algunas de ellas no están condicionadas por la edad.
El envejecimiento es, obviamente, un factor claro para su aparición, pero también influyen la genética, el tipo de piel, el cuidado que le hayamos dado durante nuestra vida y otros factores, como la exposición al sol, la contaminación o incluso alguna enfermedad. Esta es una clasificación muy básica del tipo de arrugas y los causas que suelen desencadenarlas.
Identifica los tipos de arrugas
Arrugas estáticas
Están ligadas a la edad y sí al envejecimiento, ya que son las que se producen con la pérdida del colágeno y la elasticidad de la piel. Están siempre marcadas en nuestro rostro y una vez que aparecen ya no puedes eliminarlas de forma natural, no obstante existen ciertos procedimientos artificial que te pueden ayudar a suavizarlas para que no estén tan marcadas.
Arrugas dinámicas
Al contrario que las arrugas estáticas, estas son las arrugas de expresión que aparecen por gestos repetitivos como fumar, sonreir o fruncir el ceño. Por ejemplo, los surcos se forman en la boca al sonreír o las líneas horizontales de la frente cuando expresamos sorpresa. Con el paso del tiempo se van marcando más sin embargo, la buena noticia es que no son consecuencia de la edad.
Arrugas gravitatorias
Al igual que las estáticas, en este caso sí están condicionadas por el envejecimiento,pues el motivo principal de su aparición es la pérdida de gravedad de la piel. Con el tiempo todo va perdiendo elasticidad y la piel es una de las partes de nuestra imagen en la que antes se notan los efectos. Cuando pierde firmeza, aparecen las arrugas gravitatorias.
Arrugas mixtas
Son consecuencia de los tres motivos anteriores: el paso del tiempo, la expresión y la gravedad. Por tanto, se puede decir que también están ligadas al envejecimiento a medias.
¿Qué le ocurre a nuestra piel a partir de los 60?
El envejecimiento trae consigo el aumento del número de arrugas y su profundidad. Las arrugas estáticas y gravitatorias aumentan y las dinámicas se vuelven más pronunciadas y difíciles de esconder. Además, la piel pierde suavidad y aparecen problemas de pigmentación, que propicia la llegada de manchas.
La edad es un claro responsable de las arrugas, pero no es el único culpable. Ser muy expresivos, exponernos al sol sin protección o tener predisposición genética pueden favorecer que personas con 30 años tengan la piel bastante arrugada.
Para seguir cuidándote la piel a partir de los 65 y disminuir el número de arrugas y su profundidad, evitar tomar el sol sin protección, hidrátate bien, toma alimentos ricos en antioxidantes, limpia bien tu piel cada día y deja de fumar.