Rosa María Torres
Salud
Todo lo que debes saber sobre la dolorosa apendicitis
Rosa María Torres
Foto: Bigstockphoto
Miércoles 11 de diciembre de 2019
ACTUALIZADO : Miércoles 11 de diciembre de 2019 a las 6:58 H
4 minutos
Uno de los primeros síntomas de la apendicitis es un dolor abdominal muy intenso y lacerante
Cuando el apéndice se inflama surge la temida apendicitis, un cuadro que si no se trata a tiempo puede poner en riesgo la salud de quien lo padece. Esta dolencia se produce por una obstrucción de la luz apendicular, que a su vez se debe a una acumulación de comida, heces u otros factores, como un tumor (es la causa menos frecuente), una enfermedad del intestino o la presencia de un cuerpo extraño.
¿Qué es el apéndice?
El apéndice es un órgano que se sitúa en el inicio del intestino grueso, en la zona inferior derecha del abdomen. Tiene forma de lombriz, es de color rosado (cuando no está inflamado) y en su interior hay varios folículos linfoides del sistema inmune. Sin embargo, no tiene ninguna función para el ser humano. Cuando se inflama no siempre presenta síntomas, por lo tanto, muchas veces la apendicitis se confunde con otras afecciones. Aunque puede aparecer en cualquier momento, es más frecuente entre los 10 y los 30 años.
El problema que presenta la apendicitis no es la inflamación del apéndice en sí, sino que cuando el cuadro evoluciona puede provocar una peritonitis, que pone en riesgo la vida del paciente y que consiste en la inflamación del peritoneo, la membrana que recubre parte de la cavidad abdominal. Por lo tanto, es vital un tratamiento precoz.
Síntomas
Sus manifestaciones pueden variar, por lo que es muy complicado de diagnosticar en personas de avanzada edad. Como bien es sabido, el primer síntoma es el dolor abdominal, que puede ser leve, pero a medida que pasa el tiempo se va haciendo más agudo y grave. Además, puede ir acompañado de náuseas, vómitos, mareos o fiebre.
El dolor suele desplazarse a la parte inferior derecha del abdomen, pero si el apéndice se rompe, es probable que el dolor dure menos tiempo y se note una mejoría. Sin embargo, al caminar, toser o hacer movimientos el dolor aparece de nuevo. Otros síntomas son escalofríos, temblores, heces duras o diarrea.
Tratamiento
Normalmente, el tratamiento es quirúrgico y muy urgente. Lo que se hace es extirpar el apéndice y eliminar la inflamación, un recurso al que el médico puede acudir de dos formas distintas. En primer lugar, por laparoscopia, con una pequeña incisión en la superficie abdominal por donde se pasan los instrumentos que permiten visualizar el interior y manipularlo. Una de sus ventajas es el corto post-operatorio y la rápida recuperación del paciente.
La otra opción es la laparotomía, que realiza una incisión de mayor tamaño en el abdomen para extirpar el apéndice. Finalmente, una vez que el paciente ha sido operado, se le suministran antibióticos para controlar la infección.