Expertos se muestran optimistas frente al alzhéimer: "Nunca hemos vivido un periodo tan ilusionante"
Dimensionar el impacto poblacional de una enfermedad, más, si no tiene cura, es de carácter degenerativa y requiere de cuidados de larga duración, es clave para prever y adaptar los recursos necesarios para atender a las personas afectadas.
Ahora bien, en el caso del alzhéimer, sólo se cuenta con estimaciones de cuántas personas podrían padecer la patología. Por ello, en la Confederación Española de Alzheimer (@AlzheimerCeafa), piden dar más pasos para medir la incidencia real, ya que no tener datos “dificulta planificar y diseñar políticas que den una respuesta adecuada a estas personas”.
Así lo explicó la responsable del Área de Atención Asociativa de la organización, Ainhoa Etayo, que intervino el miércoles 25 de septiembre en la II Jornada sobre avances y retos para una sociedad ante el alzhéimer celebrada en el Centro Alzheimer Fundación Reina Sofía (@Resi_ReinaSofia) en la ciudad de Madrid.
“Disponer de datos y analizarlos es importante en materia de salud”, aseguró. Y es que, por ahora, las estadísticas con las que se cuentan se basan en "una muestra determinada", lo que dificulta tener "información individualizada". Además, señaló, las estimaciones están sujetas a la calidad de la información utilizada.
Faltan datos
“Cuando hablamos de demencia o alzhéimer, no existen datos precisos de cuántas personas están afectadas”, criticó. En concreto, aseguró, existen varios índices de prevalencia y difieren entre ellos.
Por ejemplo, la Organización Mundial de la Salud habla de entre un 5% y un 8% de la población de más de 60 años. Pero el "antiguo Plan Integral de Alzhéimer" daba porcentajes menores, en base a estudios realizados en España –1,07% entre los 65-69 años; 3,4% en los 70-74 años; 6,9% en los 75-79 años; 12,1% en los 80-84; 20,1% en los 85-89; y 39,2% entre los mayores de 90 años–.
Por otra parte, desde su propia organización, CEAFA, sitúan la incidencia en el 7% de la población de más de 65 años y el 50% de quienes tienen más de 85 años.
Así, argumentó, "el no disponer de información real y actualizada" pone más complicado planificar cómo abordar las políticas sanitarias y sociales para dar una respuesta adecuada y caracterizar la situación de las "personas que conviven con la enfermedad".
El censo de CEAFA
Por esta razón, recordó, desde CEAFA decidieron crear hace casi una década un 'Censo' para incidir en mejorar los sistemas actuales de información y dimensionar el alcance de las demencias.
"Es un proyecto a largo plazo que plantea crear un registro de personas vivas diagnosticadas", indicó. Con el objetivo, puntualizó, de recolectar datos ya existentes de Sanidad y Servicios Sociales, cruzarlos, y compartir información complementaria del movimiento asociativo.
Y todo ello, apostilló, "siendo conscientes de que no todas las personas con demencia están diagnosticadas".